El pasado 29 de agosto, el Ministerio de Salud de Argentina notificó la presencia de seis casos de neumonía de origen desconocido vinculados a un centro de salud privado en San Miguel de Tucumán. Hoy son en total 13 pacientes y seis decesos. Ya se confirmó que el brote es causado por una bacteria llamada Legionella.
“Es una bacteria que puede generar cuadros clínicos muy severos en las personas que tienen problemas de defensas o personas mayores de 50 años. Incluso aquellos que son hipertensos, diabéticos u obesos pueden tener complicaciones asociadas a la Legionella”, indica José Millán Oñate, presidente de la Asociación Colombiana de Infectología.
La forma de transmisión más común es la inhalación de aerosoles procedentes de fuentes de agua contaminadas.
“Precisar que no existe el contagio persona a persona como con el COVID, la principal fuente de transmisión es el contacto con el agua. Me refiero a sistemas como jacuzzi, saunas. También, los principales casos que se han descrito tienen que ver con sistemas de ventilación”, dice Millán.
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La gravedad de la infección puede ir desde un cuadro febril leve hasta neumonía grave.
“Tenemos personas que presentan síntomas de fiebre, malestar, dolor en el cuerpo, dolor en el abdomen, diarrea y posteriormente síntomas respiratorios como tos seca, dolor en el pecho, dificultad para respirar”, agrega el experto.
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Y aunque no hay vacuna para prevenir esta infección, sí hay tratamiento. “Tenemos antibióticos disponibles en el país que tienen esa capacidad de atacar la Legionella y disminuir las complicaciones y la mortalidad asociada a esta bacteria”, indica el presidente de la Asociación Colombiana de Infectología.
En Colombia hay Legionella y se han reportado casos, sin embargo, los métodos de detección son sofisticados, lo cual puede dificultar el diagnóstico.
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