En incertidumbre permanecen cientos de pacientes que son tratados con cannabis medicinal debido a que hace más de un mes no han podido recibir el medicamento y piden una respuesta rápida al Ministerio de Salud.
El problema para recibirlo estaría en la interpretación de una definición, según explica Juan Diego Álvarez, vocero de la Asociación Colombiana de Productores de Cannabis Medicinal.
“Se tomó la definición de preparación magistral general y no de preparación magistral específica; si tomamos la específica encontramos que son medicamentos, que tienen indicaciones autorizadas por el Invima en el proceso de certificación y que si cumplen estos dos requisitos pueden ser financiadas por el sistema de salud”, detalló.
Esa incompatibilidad de definiciones lleva a que no puedan ser pagados con recursos públicos y se haya parado la dispensación contemplada con la resolución 2292 de diciembre de 2021, que inició en enero de este año, pero que vio interrumpida a finales de julio, es decir, siete meses después y cuando ya se habían iniciado tratamientos con pacientes.
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“El universo de pacientes activos, recurrentes, que nosotros hemos tratado está alrededor de 25.000 pacientes; estamos hablando que cada semana se están acumulando entre 2.500 y 3.000 pacientes que están viendo interrumpidos sus tratamientos. El 69% de los pacientes que hemos atendido son pacientes de dolor crónico, adultos mayores, tenemos también muchos pacientes oncológicos para los cuales el tratamiento es más de cuidado paliativo o de reducción de los efectos adversos de la quimioterapia como son la náusea o el vómito, ese es un grupo de alrededor de 10% en nuestros pacientes, y tenemos otro 15% de pacientes importantes que son de epilepsia refractaria, pediátricos”, señala Álvarez.
Agrega que llevan un mes en mesas técnicas con el Ministerio de Salud, que ha manifestado su voluntad de solucionar la situación.
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No obstante, el vocero de la asociación pide a la cartera informar el tiempo que le llevará resolver el problema.
“Si el Ministerio nos dice necesitamos dos semanas más, o una semana, o cinco días, o lo que sea, nosotros podemos planificar y organizarnos con nuestros pacientes para garantizar que no haya interrupción en los tratamientos, pero en este momento tenemos plena incertidumbre”, precisa.
La situación ha llevado a que pacientes empiecen a recurrir a vías judiciales como la tutela para garantizar la continuidad en sus tratamientos.