Esta semana se conoció la noticia de la muerte de un hombre en Estados Unidos que había sido trasplantado con un corazón de cerdo. Una realidad de la que pocos han escuchado hablar. Lo que tratan de establecer los médicos es si habría muerto producto de complicaciones con el órgano.
El martes 31 de octubre de 2023 falleció Lawrence Faucette, el segundo estadounidense en haber recibido un trasplante de corazón de cerdo genéticamente modificado. Aunque las razones de la muerte aún no son claras, la explicación estaría en el sistema inmune.
Jeffrey Castellanos, cardiólogo de la unidad de falla cardiaca y trasplante de Clínicas Colsanitas, dice que la causa de muerte pudo haber sido por complicaciones asociadas a la inmunosupresión y a otros rasgos, lo cual da una luz de esperanza de que no fueron complicaciones asociadas al rechazo del órgano.
"Los órganos, aparentemente por lo que ellos dicen en los reportes, estaban intactos, dentro de lo esperable para este tipo de órganos", aclaró.
Aunque este paciente de 58 años duro solo mes y medio trasplantado, su caso representa un gran avance para la ciencia.
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“Estamos cerca de poder empezar día tras día a trabajar en esto y además es un estímulo que se está haciendo porque no tenemos disponibilidad de órganos. Una de las grandes causas del estímulo que lleva esto es que no hay disponibilidad de órganos en el mundo entero. De hecho, hay tasas tan absurdas y preocupantes del 2019 al 2020 en la que la tasa de donación en el mundo entero bajó casi un 20%", asegura Castellanos.
Debido a la baja donación, hoy se estudian varias posibilidades para poder remplazar órganos.
Según el cardiólogo, en el tema de la impresión 3D se han podido cultivar tejidos. “Colombia tiene unos altos estándares, sobre todo en cultivo de tejido celulares”.
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En Colombia hay alrededor de 4.600 pacientes en lista de espera de un trasplante y, de esos, 28 están esperando un corazón.
De los 28 pacientes, hay 25 que están en una condición que se llama “urgencia cero”, que significa que están altamente enfermos y, si se retiran las terapias en este momento, el paciente va a fallecer.
Son pacientes con una alta mortalidad, “estamos hablando de perder 25 vidas en la lista de espera”, advierte Jeffrey Castellanos.
El llamado es a ser donantes. Cabe recordar que con una sola persona se pueden salvar hasta 60 vidas.