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La Mayo Clinic informó sobre un hito dentro de sus equipos de investigación: conseguir que un hombre con el rostro desfigurado tuviera un exitoso trasplante de cara. El equipo médico y el paciente beneficiado dieron detalles de la experiencia que, sin duda alguna, transformará vidas.
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De acuerdo con la Mayo Clinic, el 5 de marzo de 2014, la vida de Derek Pfaff, quien entonces era estudiante universitario de Michigan, cambió radicalmente cuando un disparo le dejó la cara gravemente dañada.
Desde entonces, ha tenido que someterse a 58 cirugías faciales reconstructivas para poder recuperar su calidad de vida, puesto que no podía comer alimentos sólidos, hablaba con dificultad y llevar lentes le resultaba imposible, pues había quedado sin nariz.
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En febrero de 2024, Derek Pfaff se sometió a un procedimiento de trasplante de cara en el cual un equipo especializado compuesto por al menos 80 profesionales lo operaron durante más de 50 horas.
Antes de entrar al quirófano, los médicos debieron pasar meses preparándose para la intervención, planificando de manera meticulosa cada movimiento. Además de crear un plan quirúrgico digital, también se hizo un mapeo del sistema nervioso facial del donante y el receptor.
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El equipo médico, el cual estaba guiado por el cirujano Samir Mardini, director quirúrgico del Programa de Trasplante Reconstructivo de la Mayo Clinic, logró que el 85% del rostro del paciente fuera reemplazado con tejido del donante.
"En el caso de Derek el tejido donado incluía parte de la frente, los párpados superior e inferior del lado derecho, la nariz, la boca, las mandíbulas superior e inferior (incluidos los dientes), así como toda la piel los músculos y los nervios de toda la cara y el cuello", explicó la entidad de salud.
Una de las partes más complejas del trasplante de cara fue lograr conectar los pequeños vasos sanguíneos del paciente y el donante, para así garantizar que el hombre pudiera volver a comer, parpadear e incluso sonreír.
"La mayoría de los trasplantes de órganos salvan vidas. En el caso del trasplante facial, es una operación que da vida. Se puede vivir sin él, pero se está perdiendo la vida", comentó el doctor Samir.
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De acuerdo con la entidad, hace 19 años se realizó el primer trasplante de cara en el mundo. Derek Pfaff fue el segundo paciente de la institución en someterse a este procedimiento en la Mayo Clinic, sin embargo, desde sus inicios, diferentes hospitales del mundo al logrado realizar más de 50.
Estudios de JAMA Surgery develaron que los resultados de supervivencia de este tipo de trasplantes son alentadores.
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Luego del incidente en el cual casi pierde la vida, la existencia de Derek Pfaff cobró un nuevo sentido. Ahora, con el trasplante de cara, tiene un vigoroso impulso para continuar con su misión de concientizar a las personas sobre la prevención del suicidio.
"Viví por una razón: quiero ayudar a los demás. Estoy muy agradecida con mi donante, su familia y mi equipo de atención en Mayo Clinic por darme esta segunda oportunidad", expresó el hombre de 30 años.
Además de someterse a otros procedimientos para seguir afinando su rostro, Derek espera que esta nueva seguridad le ayude a conseguir una pareja con la cual en el futuro pueda formar un hogar, y, posteriormente, una familia.
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Asimismo, concluyó que seguirá compartiendo su historia, pues su objetivo es ayudar a la mayor cantidad de personas que le sea posible.
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