Esta es una de las temporadas del año preferidas por las personas para realizarse procedimientos de cirugía plástica y estética. Por lo tanto, es un momento para extremar cuidados, pues muchos caen en manos inescrupulosas con la ilusión de mejorar aspectos del rostro y del cuerpo, pero esto puede hacer que termine en complicaciones, secuelas irreversibles e incluso la muerte.
Recuerde que es necesario verificar en manos de quien se pondrá y que quien lo vaya a operar sea realmente un médico con el entrenamiento debido. También preste atención al respaldo de la institución, pues en el caso de una liposucción, esta no se hace en un garaje ni en una peluquería.
Los procedimientos estéticos más comunes
Liposucción, cirugía de aumento mamario y de glúteos, abdominoplastia y levantamiento de senos son algunos de los procedimientos más solicitados en cirugía plástica.
De acuerdo con la cirujana plástica Diana Lorena Giraldo, “Colombia está entre los 10 países que más cirugías plásticas realiza en el mundo, se hacen alrededor de 500.000 cirugías plásticas al año, según las últimas estadísticas. Y Colombia ocupa entre el tercer y cuarto lugar, compitiendo con Estados Unidos y Brasil”.
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Las personas también solicitan otros procedimientos no quirúrgicos. Por ejemplo, algunos usados para el manejo de las arrugas como aplicación de toxina botulínica y de ácido hialurónico o el tratamiento de condiciones como la celulitis. Ojo, porque lo que aparenta ser sencillo, es más complejo de lo que parece, por eso en manos no entrenadas los riesgos son muy altos.
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La doctora Giraldo explicó que, “en promedio, nosotros vemos en los medios de comunicación dos complicaciones o dos fallecimientos por procedimientos estéticos mal realizados al mes, pero eso no quiere decir que sean dos. Por lo general, son muchos más”.
¿Cuál es la complicación más frecuente durante una cirugía plástica?
La experta indicó que “la complicación más frecuente cuando una persona se hace un procedimiento quirúrgico en manos no expertas y en manos sin formación, es decir, personas que no cuentan con el título de cirugía plástica, es la inyección intravascular de grasa, es decir, que cuando se está colocando inyección de grasa, sea en los glúteos, sea en los senos, esta persona, como desconoce la anatomía vascular de la zona, entonces puede inyectar la grasa dentro del vaso sanguíneo. Esto es una complicación generalmente fatal porque este émbolo de grasa, se moviliza hasta los pulmones y el paciente puede hacer casi que un paro cardiopulmonar instantáneo”.
¿Cómo saber si el lugar donde se realizará el procedimiento es seguro?
Como paciente es necesario que verifique la formación y entrenamiento de quien va a operarlo. Además, que la institución donde se realizará la intervención cumpla con las normas y requisitos para garantizar que tiene las capacidades para ofrecer seguridad. Eso se puede hacer en el Registro Único de Talento Humano, ReTHUS.
La doctora Giraldo indicó que en la opción de “‘consulta del ciudadano’, en ReTHUS, usted puede con el nombre y la cédula del especialista validar si efectivamente él o ella es cirujano plástico, estético y reconstructivo. En esa misma página usted puede validar si la clínica donde opera cuenta con la habilitación del servicio de cirugía plástica más abajito donde dice ‘Reps’”.
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También puede verificar con las sociedades y asociaciones científicas si el profesional pertenece, por ejemplo, a la de cirugía plástica, o en el caso de procedimiento estéticos a la de dermatología, entre otras.
Lo barato puede salir muy caro
“Definitivamente hay que desconfiar de tarifas muy económicas porque para realizar un procedimiento quirúrgico con calidad se debe contar no solamente con el cirujano, sino con todo el equipo quirúrgico. Tienen que tener una buena central de esterilización, un buen quirófano con todos los equipos necesarios, la tecnología y la tecnología segura cuesta”, recalcó la cirujana plástica.
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No menosprecie el tema, someterse a cualquier procedimiento, y con mayor razón si es invasivo, tiene riesgos. Por eso es necesario ponerse no solo en manos de quien esté entrenado en la intervención, sino también en el manejo de las complicaciones.
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