Expertos en salud son enfáticos en decir que las consecuencias de exponerse a una gran nube de humo como la que cubrió varias localidades de Bogotá o la contaminación del aire que se presenta en Medellín pueden reflejarse hasta 7 días después.
“Podemos estar expuestos hoy a contaminación y tener síntomas de 0 a 7 días después. La persona no sintió nada, pero al segundo, al tercer día, hasta 7 días después, que es el periodo que dura la inflamación del árbol vascular respiratorio, empieza a presentar tos, en los niños, tos nocturna, subida de tensión arterial y otros efectos, como resequedad en la piel o efectos cardiovasculares”, comenta Luis Jorge Hernández, médico salubrista.
Los niveles de la calidad del aire no son buenos, se mantienen en rojo, naranja y amarillo debido a una suma de factores, por lo que para los expertos la medida más importante debe ser a nivel distrital, para bajar las fuentes de emisión y evitar las consecuencias en salud agudas y las de mediano y largo plazo.
Una de las recomendaciones más importantes tiene que ver con la actividad física al aire libre.
“No pueden salir a trotar esta semana. El mejor día para trotar es el domingo, porque cada vez que trotan, mayor gasto respiratorio está intercambiando. Usar tapabocas ayuda un poquito, no mucho, porque eso se alcanza a filtrar en el tapabocas azul, entonces da sensación falsa de seguridad” , agrega el experto.
Sobre personas con enfermedades de base, el médico Luis Jorge Hernández hizo un llamado para que estén “atentas a señales de alarma”.
La resequedad en la piel, el ardor de ojos, el dolor de garganta y la tos son efectos de corto plazo que se pueden manejar con medidas como hidratación. Sin embargo, quienes están en las edades extremas de la vida, embarazadas y personas con enfermedades crónicas deben estar atentos a síntomas persistentes que indiquen una complicación para consultar.
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