El 25 de febrero se celebra el Día Internacional del Implante Coclear, un dispositivo médico con más de 60 años de historia que le ha cambiado la vida a miles de pacientes con sordera profunda.
Uno de cada 1.000 recién nacidos en Colombia tiene sordera profunda. Por eso es esencial que a los bebés se les haga el control y el examen para identificar rápidamente cualquier alteración auditiva y así tener un buen diagnóstico.
¿Qué es el implante coclear?
El implante coclear no es un audífono, es una tecnología que capta el sonido y envía señales al oído interno. Ahí el nervio de la audición las capta y las envía al cerebro.
Es un dispositivo seguro, probado y que cambia vidas no solo de pacientes, sino de familias.
Yulian Enríquez Díaz es uno de los ejemplos de los buenos resultados de este dispositivo. Este joven ha ganado muchas medallas por las competencias de natación sordolímpica en las que ha participado. A los 19 años ya ha hecho una carrera ejemplar.
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Desde muy pequeño empezó a usar audífonos, pero su audición con el tiempo se siguió deteriorando. Por eso, a los 8 años le colocaron un implante coclear en el oído izquierdo, dispositivo que usan pacientes con pérdidas severas de la audición.
El implante coclear estimula directamente el nervio auditivo y envía las señales generadas por el implante al cerebro, que las reconoce como un sonido.
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“Es un dispositivo electrónico que tiene como función rehabilitar al paciente que no tiene audición. Se coloca debajo de la oreja y debajo del cuero cabelludo. Tiene estimulación eléctrica”, explicó José Agustín Caraballo, otólogo.
Además del procedimiento de implantación, el paciente requiere terapias de rehabilitación para obtener todas las ventajas a nivel auditivo, social, laboral y, sobre todo, a nivel escolar para aprender a hablar y escribir de manera adecuada.
Entre más temprano se realice el tratamiento, mucho mejor. De ahí la importancia del diagnóstico a tiempo.
“Al nacer los bebés hay que hacerles un tamizaje auditivo. Si el niño presenta algún tipo de ausencia al llamado, al ruido, que no voltee cuando lo llaman, hay que estar muy pendientes”, agregó Caraballo.
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Estos son exámenes y tratamientos a los que cualquier niño, e incluso adultos, tienen acceso a través del plan de salud básico o a través de las EPS.