Lo que no percibe el ojo humano será más difícil que se le escape a los robots.
Según el Instituto Nacional de Cáncer de los Estados Unidos, la mamografía no detecta al menos un 20% de los casos.
“Mi doctor me dijo que el cáncer estaba presente al menos hace 10 años, tiempo en el que me había hecho muchas mamografías y hasta ahora lo detectan”, cuenta Julianne Major.
También puede pasar que en 1 de cada 10 casos el resultado sea falso positivo. Esto le pasó a Norma Vaquerano, quien asegura que “estaba completamente devastada, no podía creer cuando me dijeron que tenía cáncer”.
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Errores como los cometidos con estas mujeres prometen cambiar con la inteligencia artificial.
Gracias a un programa, robots son ‘alimentados’ con miles de datos sobre mamografías, lo que les permite aprender patrones y ser más precisos a la hora de dar un diagnóstico. Pero eso no es lo único, científicos también han diseñado un software para lectura de biopsias.
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Además de diagnósticos más precisos, la inteligencia artificial promete que sean más rápidos.