Antioquia, Guainía, Guaviare, Meta, Nariño, Norte de Santander, Putumayo y Valle del Cauca son los ocho departamentos donde hay alerta por dengue. No obstante, hay otras regiones donde también están prendidas las alarmas: Casanare, Sucre, Bolívar, Cesar, Córdoba, Atlántico, Tolima y las ciudades de Cali y Barranquilla.
Eduardo López, director del Centro Estudios Infectología Pediátrica, explica que “se trata de una enfermedad endémica, que convive con nosotros y que tiene unos picos epidémicos que nos causan mucho daño. Ocurren aproximadamente cada 3 años y han ocurrido en el 2013, 2016 y 2019, entonces ya es cuestión de hacer cálculos y probablemente estamos cercanos a otro pico”.
Aunque en la mayoría de casos el dengue suele ser leve, se pueden dar cuadros graves.
“Los casos ocurren en niños y adultos jóvenes, la mayoría de los casos. Las personas que sufren complicaciones son aquellas más vulnerables, que tienen ciertas comorbilidades, que tienen problemas inmunitarios, defensas bajas, pero desafortunadamente puede ocurrir en cualquier persona, una persona fuerte, una persona joven, puede tener complicaciones por dengue y es por esto que es una enfermedad que nos compromete a todos”, recalcó el experto.
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Por eso, quienes viven y viajan a zonas con altitudes inferiores a 2.200 metros sobre el nivel del mar, donde se encuentra el mosquito transmisor del dengue, deben incluir precauciones que empiezan por evitar estancamientos de agua.
“Lo segundo es evitar la picadura de mosquito, utilizar repelentes, mangas largas y que empecemos a conversar la posibilidad de que muy pronto tendremos en Colombia de vacunas autorizadas y recomendadas por sociedades científicas”, indicó el infectólogo López.
Y es que hay varias vacunas en desarrollo, incluso una ya aprobada en el país que ha tenido limitaciones para su aplicación y otra candidata en proceso regulatorio de la que pronto podría haber noticias.
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El doctor señala “que ofrece una protección muy alta contra hospitalización y contra casos de dengue virológicamente confirmados, que su protección se mantiene en el tiempo, así que estamos esperando ansiosamente los resultados favorables de esta revisión por Invima”.
Es un esquema de dos dosis con espacio de 3 meses y se aplicaría desde los 4 años en adelante, por supuesto, priorizando a los más vulnerables.