Este martes, 6 de diciembre de 2022, pasó lo que hace varios meses esperaban diferentes sectores políticos: que el mismo registrador Alexander Vega solicitara el aplazamiento del trámite del cuestionado código electoral, iniciativa que lideraba junto al Gobierno nacional.
Después de varios tropiezos en la comisión primera y una fuerte oposición de un grupo de senadores que rompió el quórum para no votar la reforma, el registrador cedió y pidió al presidente de la comisión, a través de una carta, que aplace la discusión para marzo de 2023.
Vega también solicitó que se retire del proyecto todo lo relacionado con el registro civil, uno de los temas más polémicos porque, según las denuncias, abría la puerta a numerosas contrataciones a dedo.
Publicidad
Varios congresistas le contaron a Código Caracol que el registrador quería sacar la iniciativa adelante a como diera lugar. Lo que sucedió al final fue que el Gobierno le quitó respaldo ante la cascada de cuestionamientos.
Publicidad
Los cuatro protagonistas de la estrategia para evitar la discusión del polémico proyecto fueron el senador independiente Humberto de la Calle; Paloma Valencia, del Centro Democrático, y Ariel Ávila y Jota Pe Hernández, de la Alianza Verde. Una inusual alianza que dejó al registrador con los crespos hechos.
“Me siento muy satisfecho porque finalmente, con la expresión del registrador y una conversación que acabo de tener con el ministro del Interior, me parece que queda claro que en marzo nos aplicaremos juiciosamente a estudiar el código”, dijo De la Calle.
Publicidad
Por su parte, Paloma Valencia dijo que les “alegra que este primer paso se dé”, pero anotó que “esto no significa una victoria total porque en marzo hay que tener cuidado de hacer una discusión muy rigurosa”.