En una jornada de alta tensión, el Gobierno logró sacar adelante la reforma pensional
en su segundo debate. La aprobación se dio a último minuto, con voto finish, pese a la intención de la oposición de deshacer el quorum y promover el plan tortuga.
Carlos Meisel, del Centro Democrático, decía “que aquí no está el Partido Conservador ni Cambio Radical, y anuncio que si le siguen poniendo esto los patines que le están poniendo van a dejarlos a ellos sin la expresión de votar una cosa tan importante como la vigencia”.
Enrique Cabrales, del mismo Partido, pedía “que estén en todas las bancadas presentes. Estamos hablando de una vigencia de una reforma pensional. No estamos hablando de un proyecto de ley cualquiera”.
Así buscaron los votos
Pero el Gobierno contó con aliados que, sin importar el sentido de su voto, impidieron romper el quorum. Los senadores conservadores Carlos Trujillo y Miguel Ángel Barreto no se movieron de sus sillas a pesar de la ausencia de su colectividad.
Por los lados del Partido de la U, ocho senadores apoyaron activamente la reforma.
Otros que hacen parte de la bancada de Gobierno cotizaron su voto al alza, fueron acompañados por el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, y se sentaron a negociar.
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Y unos cuantos salvaron al Gobierno al último minuto, cuando la votación agonizaba y el pesimismo arropaba el recinto.
La senadora María José Pizarro se pronunció y reconoció el “comportamiento ejemplar de la bancada Liberal, de la bancada de la U. Un agradecimiento a la bancada de la U y a quienes a pesar de haber votado en contra cumplieron con el deber de permanecer en esta plenaria”.
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Al aprobarse la reforma pensional, la bancada de Gobierno gritó algo que esperó por meses: “¡Sí se pudo!”. Además, en las manos de varios congresistas se leía un mensaje: “Aguanta pensionarse”.
Tuvieron que pasar más de diez sesiones en el Senado, entre negociaciones y conciliaciones, donde el Ejecutivo tuvo que ceder para que la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, pudiera cantar victoria frente a la plenaria.
“Nosotros llevamos hoy 18 meses construyendo. Hemos construido el proyecto de ley que muchos no querían. Hemos construido y hemos avanzado en una carrera de obstáculos, pero solo el tesón, la convicción de que Colombia lo necesita y que hay que proteger a estos adultos mayores”, expresó.
Para que la reforma pensional se convierta en ley de la República, faltan dos debates que se tienen que surtir antes del 20 de junio en la Comisión Séptima y la Plenaria de la Cámara de Representantes.
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