En las últimas horas se conoció un video del presidente Gustavo Petro hablando, supuestamente, en estado de alicoramiento. El mismo mandatario manifestó que se trata de un montaje y que denunciará a la persona que manipuló el video.
“Como presidente de Colombia rechazo la manipulación que el señor Ernesto Yamhure, habitante de los Estados unidos, ha hecho de este video, cambiando sus tiempos para aparentar estado de embriaguez. La calumnia es un delito”, trinó.
De acuerdo con expertos en ciberseguridad, existen herramientas tecnológicas que buscan deslegitimar o hacer ver en ridículo a una persona, como alguna vez le ocurrió a Nancy Pelossi, quien supuestamente también estaba ebria, pero que todo se trató de un montaje.
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“Se utilizan tecnologías artificiales, corrientes denominadas deep fake. Estas tecnologías modifican el video al punto tal que podrían hacer decir algo que nunca dijo, esto sobre todo lo utilizan con personas muy conocidas, famosos, artistas, políticos. Además de reemplazar su boca, hacer decir palabras que nunca dijo, también se puede tomar discursos reales y modificar el tono de la voz, ralentizar el tono y hacerlo pasar como si esa persona estuviera ebria”, explicó Maximiliano Cantis, experto en ciberseguridad.
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Fuentes de la Casa de Nariño le aseguraron a Noticias Caracol que el presidente Petro denunciaría ante la justicia esta situación. El penalista Ricardo Burgos explicó las consecuencias para la persona que realice este tipo de calumnias: “En Colombia la conducta se adecúa a una injuria, que tendrá una pena entre 16 a 54 meses de prisión. Es claro que esta persona pretende deshonrar moralmente al presidente alterando los videos y más aun cuando se tiene en cuenta por parte de los periodistas que estuvieron con el presidente que es falsa dicha alocución en estado de embriaguez. Es una alteración vulgar que se realiza en este caso. La ley colombiana prevé este delito, es injurioso, y sí podría ser denunciado por el presidente en estos momentos”.
Algunas redes sociales castigan con suspensión y cierre de las cuentas cuando se comprueba que la información emitida en esas plataformas es falsa y afectan a una persona o empresa, pero además el responsable podría enfrentar procesos penales que incluso implican cárcel.