Se terminó la primera legislatura del 2023 y en el balance no le fue muy bien al gobierno de Gustavo Petro
ni a la coalición del Pacto Histórico en materia de las reformas sociales que estaban impulsando. La duda que se abre ahora es cuál será el escenario para lo que resta del año.
En el Ejecutivo hay preocupación porque creen que hay una amplia posibilidad de que se rehaga una coalición mayoritaria en el Congreso en la que el Pacto Histórico podría quedar marginado.
La primera coalición se creó para distribuir las mesas directivas del Congreso y para incidir en la elección del contralor general. Con el rompimiento de ese acuerdo por parte del propio presidente se abrió la posibilidad de que los partidos que han estado en oposición y los tradicionales pretendan ahora rearmar esa mayoría sin el partido de gobierno.
El último día del periodo de sesiones ordinarias hubo dos hechos que encendieron todas las alarmas. Por una parte, esos partidos se aliaron, hicieron mayoría y aprobaron el proyecto de código electoral con la oposición de los miembros del Pacto Histórico, quienes en la Cámara salieron del recinto.
Por otra parte, también aliados los partidos Centro Democrático, Cambio Radical, Conservador, Liberal y la U aprobaron una proposición para que la mesa directiva del Congreso aplazara la elección de nuevo contralor, ordenada por el Consejo de Estado contra la voluntad de las colectividades que apoyan al presidente Petro.
Por eso, la pregunta que queda en el aire es qué tiene en mente el presidente Petro cuando el escenario pinta adverso en la próxima legislatura.
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Atención a La Guajira
Desde Francia, el presidente Gustavo Petro manifestó que declarará emergencia económica y social para atender a la población de La Guajira de cara a la ola de calor. “La agudización de la crisis climática eleva la temperatura en promedio 1.5 (grados) y trae un evento que puede hacer perdurar en el tiempo El Niño”, señaló.
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Por otra parte, habló de tres ejes fundamentales para atender en el departamento de La Guajira. “El agua es fundamental, los niños que mueren es por falta o baja calidad de agua”. También añadió que la salud se priorizará.
Y en tercer lugar explicó que se debe trabajar en “la base económica que pudiese hacer sostenible la presencia de los pueblos wayú e indígena y la población en general en el territorio guajiro, que va a ser muy afectado por la escasez de agua”.