Con dos reuniones del más alto nivel terminó la agenda del presidente Gustavo Petro en Múnich, Alemania. El jefe de Estado de Colombia habló con el canciller de la República Federal de Alemania, Olaf Scholz.
Asimismo, el presidente Gustavo Petro sostuvo un encuentro con Josep Borrell, vicepresidente y alto representante para las relaciones exteriores y política de seguridad de la Comisión Europea. Ellos hablaron, entre otros temas, sobre cómo desplazar las economías ilícitas del territorio nacional.
“En esas reuniones hablamos precisamente de ese tema: hoy la violencia está regionalizada. El territorio ligado a la economía ilícita es la cuna de la violencia de hoy. Por lo tanto, la cuna de la paz es que en el territorio podamos reemplazar las economías ilícitas, como la cocaína y el oro, por economías lícitas y prósperas”, aseguró Petro.
El presidente Petro solicitó al gobierno alemán y a la Unión Europea combatir las economías ilícitas que proliferan en Colombia: “Estos países sí que nos podrán ayudar, solo hay que hacer una cosa: comprar la producción del mundo rural, del campesinado, de la gente en esas regiones durante unos años y prácticamente podríamos salir de eso. Ese es el eje fundamental del Gobierno”.
En su último día de trabajo en Alemania, el presidente Petro también se refirió a la crisis en Venezuela y dijo que seguirá trabajando por el restablecimiento de la democracia en ese país.
Asimismo, insistió en el retorno de Venezuela a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
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