En medio de los avances para la reanudación de diálogos con el ELN, se hizo pública la situación de orden público que viven desde hace un mes en Arauca por la disputa a sangre y fuego entre esa guerrilla y las disidencias de las FARC por el control de una extensa zona del departamento. Lo más crudo de estos enfrentamientos es el reclutamiento forzado de menores de edad y el confinamiento de más de 20 mil familias.
Los niños ni siquiera han podido estudiar, afirma Édgar Guzmán, secretario de Gobierno de Arauca, por información que ha recibido sobre grupos armados que “se habían instalado dentro de las escuelas, habían entrado a las aulas de clase, se habían posicionado de estas áreas y habían prohibido el desarrollo de las clases, lo que es muy complejo para los profesores y los niños que están adelantando clases”.
Documentar estos hechos resulta imposible, pues los criminales les han quitado los celulares a los habitantes para evitar que graben.
Conmovido y con la voz quebrada, el secretario dijo que “la comunidad nos informaba que dentro de las filas de los grupos al margen de la ley hay menores de edad, hay niños de hasta 12 años. Esos niños están portando armas, están utilizando uniformes”.
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Más de 20 mil familias permanecen en medio de los combates, especialmente en zona rural de Arauca, Arauquita, el corregimiento Cañas Bravas y Puerto Rondón.
“En algunos sectores tenemos vehículos quemados, en algunos sectores han dejado municiones o artefactos explosivos que no se sabe si están activos o si ya fueron explotados; sin embargo, los habitantes nos anuncian que están al margen de la orilla de las carreteras”, detalló Guzmán.
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Lo paradójico, según el funcionario, es que paralelamente a este conflicto, el ELN y las disidencias de las FARC hablan de la posibilidad de paz.
Por eso hace un llamado al Gobierno para que “verifique si realmente los grupos armados al margen de la ley tienen esa voluntad, si realmente quieren sentarse a hacer un proceso de paz, porque de nada nos sirve que estén anunciando cosas muy positivas, pero en el territorio araucano sigan haciendo lo contrario”.
Precisamente, Danilo Rueda, comisionado de Paz, instó al ELN y a las disidencias de las FARC a que “escuchen por favor a la población, cesen el uso de la violencia en medio de la población, cesen la violencia entre ustedes. Son hermanos, son compatriotas, somos hijos de la misma tierra llamada Colombia. Invitamos a que cesen sus operaciones armadas en este momento”.
Delegados de la gobernación, Naciones Unidas
y población civil tuvieron un encuentro de emergencia y la próxima semana habrá un consejo extraordinario de seguridad.