El presidente electo Gustavo Petro y su canciller designado, Álvaro Leyva, se reunieron la mañana de este jueves, 4 de agosto, con el nuncio apostólico en Colombia, monseñor Luis Mariano Montemayor. Hablaron del apoyo al nuevo gobierno en materia de paz y de la frontera con Venezuela.
Por cerca de hora y media, dialogaron con el representante del papa Francisco en nuestro país. Al final del encuentro, el canciller designado Álvaro Leyva aseguró que el tema central fue la paz y, con ello, la voluntad total de la Iglesia Católica para colaborar en eventuales diálogos con el ELN.
“Ellos están dispuestos a colaborar en todo. Hay una tradición con respecto a los diálogos con el ELN y, naturalmente, los diálogos humanitarios. En la costa Pacífica, y en otros sitios del país que son altamente complicados, siempre ha estado la Iglesia”, dijo Leyva.
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Sobre la llamada paz total, el canciller reiteró que tiene que haber claridad sobre el acogimiento del Clan del Golfo, que se trata de una serie de beneficios que recibirían solo si cumplen con las condiciones impuestas. Algo similar a lo que ocurriría con las disidencias de las FARC.
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Se trata de “buscar una paz total, aquí vamos a tratar de que nadie quede por fuera, se busca es la tranquilidad pública y la recuperación de las regiones. Y, obviamente, hay un eje que está en todos los diálogos atravesado en el país, que es el tema del narcotráfico”, reiteró.
Acerca de la frontera entre Colombia y Venezuela, el funcionario entrante enfatizó que no se abrirá desde el próximo 7 de agosto, cuando se posesiona el nuevo gobierno, sino que será de manera progresiva.