Martha Mancera es considerada una de las mujeres más poderosas al interior de la Fiscalía General de la Nación. Lleva tres décadas en la entidad. Inició su carrera como fiscal delegada ante los jueces especializados y luego como delegada ante los jueces del circuito.
Sin embargo, cobró relevancia cuando llegó a la dirección seccional del CTI en Cali y después como directora seccional de la Fiscalía en el Valle del Cauca. En una entrevista entregada al diario El País de Cali, Martha Mancera aseguró entonces que su principal reto era la lucha contra la violencia en Buenaventura.
Su nombramiento como vicefiscal de la administración Barbosa fue una casualidad. Se dio el 17 de febrero de 2020, cuando Juan Francisco Espinosa, exdirector de Migración Colombia, declinó el cargo tan solo dos días después de su nombramiento.
“Tenemos una vicefiscal de hierro, contra la corrupción y contra la criminalidad. Aquí los únicos que deben estar preocupados con esta decisión son los corruptos y los bandidos que no van a poder acercarse a la Fiscalía General de la Nación porque tenemos un cuerpo muy sobrio para luchar contra la corrupción en este país”, acotó en aquel momento Francisco Barbosa.
Como vicefiscal, Martha Mancera también ha asumido importantes investigaciones como las chuzadas a las exniñeras de Laura Sarabia, el suicidio de coronel Óscar Dávila y las supuestas irregularidades de la SAE en el manejo de bienes.
Es la tercera mujer que llega al cargo de fiscal encargada, después de dos grandes juristas como Viviane Morales y Martha Lucía Zamora.
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Martha Mancera también ha tenido sombras en su carrera. Algunas de ellas tienen que ver con supuestos favorecimientos a organizaciones criminales del Valle del Cauca que le costaron dos indagaciones en su contra, pero que fueron archivadas por el mismo ente acusador hace menos de tres meses.
Otro de los escándalos de Martha Mancera es uno divulgado por la revista Raya respecto al supuesto encubrimiento al director del CTI en Buenaventura, Francisco Javier Martínez, quien está vinculado con una organización de tráfico de armas y narcotráfico.
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Según la investigación de la revista, existe “una amistad de vieja data” entre Francisco Javier Martínez y la vicefiscal, quien habría persuadido para que no se adelantara un proceso contra el funcionario acusado de ser “el centro que querían golpear (otros agentes del CTI) para desarticular esa organización que está en red sacando cocaína desde Buenaventura”.
Quien acompañará a Martha Mancera como vicefiscal, también encargado, es Gabriel Ramón Jaimes Durán, otro de los alfiles del saliente fiscal Barbosa, quien lo defendió en varias oportunidades y ha protagonizado igualmente polémicas.
Jaimes es abogado con más de 30 años de experiencia en la rama Judicial. Actualmente, es el coordinador de fiscales delegados ante la Corte y fue hombre de confianza del exprocurador Alejandro Ordóñez.
Bajo sus hombros ha tenido casos tan destacados como los magnicidios de Álvaro Gómez Hurtado y Luis Carlos Galán, así como las nuevas líneas de investigación del caso Odebrecht, los presuntos perfilamientos del Ejército, el caso del expresidente Álvaro Uribe Vélez, entre otros.
Tras la salida de Francisco Barbosa, Martha Mancera será la fiscal general de la Nación de manera temporal, algo que no agradó al petrismo.
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