Después de 12 días en cautiverio, Luis Manuel Díaz, papa del jugador Luis Díaz, fue liberado este 9 de noviembre por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), quien lo tenía en su poder desde el 28 de octubre. Al conocerse la noticia, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se pronunció en redes sociales.
"Viva la libertad y la paz", escribió el mandatario en su cuenta de X.
El secuestro del papa de Luis Díaz tuvo lugar en Barrancas, Guajira. Luis Manuel se encontraba con Cilenis Marulanda, su esposa y madre del jugador colombiano, cuando miembros del ELN los interceptaron y retuvieron forzosamente. Las autoridades lograron rescatar a Cilenis la misma noche que se produjo el crimen, pero a Mane los terroristas lo llevaron a una zona rural.
Inicialmente no se sabía quién había secuestrado al papa de Luis Díaz, pero el pasado 2 de noviembre el ELN reveló que Mane estaba bajo su poder. La noticia fue confirmada por Otty Patiño, jefe de la delegación del Gobierno de Gustavo Petro en los diálogos con la guerrilla.
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Posteriormente, el presidente Petro se pronunció y responsabilizó al ELN de cualquier violación a la integridad de Mane Díaz.
“El ELN es el responsable hoy de la vida de Luis Díaz, ha hecho un acto que va contra el mismo proceso de paz. En el desarrollo de los acontecimientos no ha sido capaz del liberarlo. En la medida que el tiempo pase se tornan muy peligrosas las circunstancias en las que está el señor Luis Díaz”, dijo en su momento el jefe de Estado.
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De igual forma, el Gobierno desplegó un operativo que involucró a más de 200 hombres de la Policía y el Ejército, drones, helicópteros y hasta grupos especiales Jungla para encontrar a Luis Manuel. Las autoridades encontraron abandonados dos vehículos usados en el secuestro del papá de Luis Díaz y motocicletas.
Así mismo, se ofreció una recompensa de hasta 200 millones de pesos para quien entregara información que permitiera dar con el paradero del profe Mane Díaz. Sin embargo, para facilitar la liberación, el Gobierno ordenó cesar las operaciones militares.
Este secuestro, que indignó a colombianos y extranjeros, pone en riesgo el proceso de negociación que tiene el Gobierno Petro con el ELN. A través de un comunicado de prensa, esa delegación exigió que la guerrilla deje de cometer crímenes si quieren avanzar en las negociaciones.
"Nuestra delegación considera que el secuestro de Luis Manuel Díaz ha sumido nuestro diálogo en una situación crítica y, por ello, ha llegado el momento de tomar decisiones que eliminen el secuestro, como lo hemos solicitado desde el comienzo de los diálogos. Nuestra delegación exige desde ya, y exigirá en la próxima reunión con la delegación del ELN, que cada una de las personas que esta organización tiene en cautiverio sea liberada en condiciones de seguridad y dignidad de manera inmediata", enfatizaron los representantes del Gobierno.
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Además, en declaraciones a Noticias Caracol, José Félix Lafaurie, delegado del Gobierno nacional en los diálogos con el ELN, cuestionó “¿cuál sería la explicación que les daríamos a las familias colombianas, cuyos familiares están secuestrados, de que hay ciudadanos que tienen una condición relevante frente a los demás?”.
Agregó que esto es “un punto de inflexión, porque cuando salimos de Cuba evidentemente las declaraciones de Pablo Beltrán no fueron asertivas en esa dirección. Sostuvo la tesis de que iban a hacer retenciones económicas cuando hubiera necesidad”.