León Valencia, de la Fundación Pares -Paz y Reconciliación-, consideró que el ELN debe eliminar el secuestro dentro de sus prácticas luego de que ponga en libertad al papá de Luis Díaz,
Luis Manuel Díaz, a quien retuvo el pasado sábado 28 de octubre.
“El ELN tiene que saber que el delito más odiado por la sociedad colombiana es el secuestro y el papá de Lucho es una persona que suscita también mucho cariño, porque también es el jugador más querido por la sociedad colombiana. Entonces es una cosa muy fuerte que se le ocurrió a este grupo allí”, dijo en entrevista con Noticias Caracol.
¿Se perdió la unidad de mando del ELN con este acto?
“Sin duda hay una desconexión entre el mando central y este grupo de La Guajira. Pueden discutir que no hay un acuerdo explícito en el cese al fuego sobre el secuestro”, consideró el experto, añadiendo que “la unidad de mando se va a demostrar si son capaces los del comando central y la mesa negociadora de obligar al grupo que lo secuestró a que lo entregue,
sería una muestra de que controlan por lo menos el daño después de hacerlo y que pueden definir la entrega del papá de Lucho en esa circunstancia”.
León Valencia recordó que las extintas FARC, “incluso para entrar en la negociación de paz, ya en el momento en que entró, abolió el secuestro porque sabía que ese delito le iba a pesar mucho en el curso de la negociación. Este delito del secuestro pesa mucho en una negociación y el ELN bien haría inmediatamente como parte de resarcimiento por este hecho, una vez liberen al papá de Lucho Díaz, al mismo tiempo anunciar que van a abolir esta práctica del secuestro. Porque el secuestro ya no es moneda de negociación, ni política ni económica, que eso es una de las cosas que más desprestigió a la guerrilla y que más le cargó una denuncia de la opinión pública”.
Respecto a que alias Bernardo Téllez
esté en la mesa de negociación y pertenezca al frente que secuestró al papá de Luis Díaz, el analista señaló que “deben examinar internamente cómo conducir este proceso, cómo mantienen un control sobre todas las acciones del grupo, porque seguramente los de ese grupo van a discutir”.
León Valencia insistió en que “cuando uno pone en la cara de la opinión pública un hecho tan grave contra una persona que el país quiere tanto, como es Lucho Díaz, pues eso no le va a salir bien, ni en el ámbito nacional ni en el internacional. Uno de los jugadores más cotizados del mundo está en el ojo del huracán por este hecho”.
Indicó que resulta un agravante contra el ELN que “Lucho sea una persona que viene de abajo, del lugar más humilde y del pueblo pueblo. Tanto que, precisamente en La Guajira, uno de los departamentos más olvidados de Colombia, uno de los departamentos con la crisis más grande humanitaria y con la crisis social más grande, es el hogar de Lucho Díaz. Eso cae muy mal porque dicen que entonces porque tiene éxito una persona de abajo, del pueblo, ¿entonces está obligada a pagar dinero por un secuestro? ¿Y cómo se hace eso ante la opinión internacional? ¿Cómo podrían creer que entonces iban a negociar, si era un secuestro extorsivo, que iban a negociar y que eso no se iba a ver muy mal en la opinión pública nacional e internacional?”
“Es un absurdo lo que han hecho y ojalá lo corrijan rápido. Y ojalá vayan más allá de corregir el hecho y anuncien al país una abolición del secuestro”, concluyó León Valencia sobre el secuestro del papá de Luis Díaz.
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