La seguridad y la movilidad son los retos más importantes que tiene Gustavo Petro en grandes ciudades como Bogotá, donde la mayoría de electores apostó por su triunfo.
La capital le dio 2.253.997 votos a Petro, y parte de esos sufragios de confianza están puestos en esos dos aspectos fundamentales. Los bogotanos esperan que los desesperantes trancones tengan una salida desde el nuevo gobierno.
"La nación destina muchos recursos a los entes territoriales, algunos de ellos dependen de las transferencias de la nación. En el caso de Bogotá, la nación es estratégica para la financiación del metro, que, entre otras cosas, Gustavo Petro mencionó que iba a revisar el esquema del metro elevado", indicó Ómar Oróstegui, director de Futuros Urbanos.
Para los expertos, el nuevo presidente tendría que ayudar a solucionar el déficit en el transporte público de Bogotá y de grandes ciudades, antes de que quiebren.
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La inseguridad también está dentro de las demandas de los bogotanos, que se han visto expuestos a casos de asesinatos por hurtarles, incluso, una bicicleta o un celular.
"Se va a construir una cárcel en predios de La Picota, ese compromiso hay que mantenerlo en la medida en que Bogotá requiere de una nueva cárcel porque definitivamente no hay capacidad en las que hay en este momento y las URI y estaciones están muy hacinadas", recalca Hugo Acero, experto en seguridad.
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En manos del nuevo presidente está también la presencia policial. “Hay un tema muy importante y es precisamente el aumento del pie de fuerza, que ya se ha definido. Bogotá ya ha recibido nuevos policías, pero se tiene previsto que para el año entrante también ingresen nuevos”, agrega Acero.
Analistas coinciden en que los bogotanos serán rigurosos en vigilar que el cambio también sea para la capital del país.
"Hoy Bogotá le da el triunfo electoral como presidente, y Bogotá es una ciudad que también exige y le va a exigir muchos cambios. Cambios que no dan espera, en seguridad y en movilidad", explica Omar Oróstegui.
Además, la educación pública gratuita y de calidad hace parte de las apuestas de los bogotanos más jóvenes.