La responsabilidad de la defensa de Colombia en el litigio con Nicaragua
en la Corte Internacional de Justicia recae en el canciller Álvaro Leyva Durán, un hombre de larga trayectoria que lidera las relaciones internacionales del gobierno de Gustavo Petro. El ministro de Relaciones Exteriores habló sobre este tema y también de las relaciones con Estados Unidos y con Venezuela.
Colombia presenta sus argumentos ante La Haya por el litigio con Nicaragua. ¿Qué es lo nuevo?
Álvaro Leyva afirmó que el gobierno llega con “una visión diferente. Yo apuesto el éxito, no estoy acá para aplaudir los fracasos o darme por vencido antes de hacer presencia. No se han tenido en cuenta ante la Corte Internacional de Justicia las pruebas científicas”.
“Que nadie cante victoria y tenga la seguridad de que al final se va a lograr una cosa armónica, nadie va a descubrir la pólvora”, sostuvo, recalcando que Colombia va “a ir hasta las últimas consecuencias”.
Álvaro Leyva fue enfático en decir que no se va “a poner a sumar lo que costó o ha costado defender a Colombia desde comienzos del siglo pasado, se me hace absolutamente ridículo. Como canciller lo que tengo que producir son resultados, más allá del costo, porque cualquier contrato que se haga va a ser chiquitico al lado de los éxitos que se pueden lograr”.
¿Cuál es el gran reto de Colombia por su postura frente a las drogas?
Según el canciller, “hay una presencia renovadora a partir de su discurso (el de Petro) en la Asamblea de la ONU que llamó muchísimo la atención. Estuve presente y me impresionó la reacción de la gente, en donde dice ‘Colombia no es narcotráfico, Colombia es una solución para el mundo y lo vamos a demostrar a partir de América Latina. Que sea un ejemplo para el resto del planeta’”.
Álvaro Leyva ahondó en otros temas y afirmó que en Colombia “se cree que ser progresista es haber sido elegido con votos de izquierda. Ser progresista es estar en la posmodernidad”.
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Puso como ejemplo “el caso de la migración, todo el mundo habla de la migración (…) Hay problemas en todas partes, pero se va a convocar a toda América Latina, a sus jefes de Estado, esa es la aspiración, en el primer trimestre, para tratar de diseñar una política de migración que sea un ejemplo. Yo tengo que apostarle a mi presidente, que me está entusiasmando por lo que está diciendo en el exterior”.
Añadió que “se va a invitar a todos los que están, países afluyentes, incluyendo a (Emmanuel) Macron, porque en América Latina hay un estado francés, que naturalmente tiene que ver con la zona amazónica”.
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¿Cuál ha sido la mirada de EE. UU. para el gobierno de Petro?
“EE. UU. le ha dado un tratamiento especial al gobierno Petro, ha reconocido un liderazgo y he estado allá hablando de los temas centrales: narcotráfico, extradición, seguridad, migración”, afirmó Álvaro Leyva, quien considera que el país norteamericano “es un compañero de tránsito y mucho más estando en nuestro continente”.
¿Colombia está jugando un papel importante entre la oposición venezolana y el gobierno del presidente Nicolás Maduro?
“Nosotros como vecinos, habiendo tomado la iniciativa, incluso antes de la posesión, de ir a visitar el vecino país, eso tiene sus implicaciones y naturalmente eso llamó la atención de Maduro, a quien se le había dado la espalda por las razones que se quiera, no le voy a echar la bendición a nadie”, dijo el canciller colombiano al referirse a las relaciones binacionales.
“Dos mil ciento y pico de kilómetros con Venezuela, nuestro país vecino, una población que está allí, que se pasa de un lado para otro, sin autoridad de ninguna clase, sin consulado, sin relaciones diplomáticas, como si no existiera, eso se convierte en un volcán con situaciones económicas realmente difíciles en Venezuela”, además de “una confusión en el orden jurídico, jurisdiccional, de comercio exterior, del contrabando, del narcotráfico. ¿Podíamos seguir así? De ninguna manera”, añadió.
¿Qué va a pasar en Colombia?
El canciller lo comparó con los juegos de azar: “Nunca compro lotería, pero me dicen los que compran lotería que llega un momento en que están en un estado de incertidumbre hasta el día en que se muestran los números”.
“Gobernar tiene mucho de riesgo (…) pero esto es una buena apuesta y después la historia dirá si se hizo bien o si se hizo mal, pero la apuesta es ganadora y nos vamos a jugar al éxito”, concluyó.