El presidente de Colombia, Gustavo Petro, firmó una resolución para "excluir como representantes" del grupo en las negociaciones de paz a Jobanis de Jesús Ávila, conocido con el alias de Chiquito Malo, junto con otros dos cabecillas del Clan del Golfo, según un documento divulgado por la prensa local cuya autenticidad fue confirmada por Álvaro Jiménez, delegado del gobierno para los acercamientos, en entrevista con Caracol Radio este martes 31 de diciembre.Chiquito Malo es considerado el máximo líder del principal grupo narcotraficante de origen paramilitar, que hoy se hace llamar Ejército Gaitanista de Colombia. Es el reemplazante de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, tras su captura y posterior extradición a Estados Unidos en 2022.(Lea también: Presidente Gustavo Petro pidió encontrar a responsables de masacre de familia en Aguachica, Cesar)Con la resolución "se espera que en el año 2025 podamos pasar a una fase pública de instalación de una mesa" de conversaciones de paz con el Clan con miras a "la finalización de su existencia", aseguró Jiménez.¿Cuántos negociadores del Clan del Golfo quedan habilitados?Tres de los seis negociadores inicialmente propuestos por Petro en julio continuarán en la mesa, según la nueva resolución. "Consideramos que es suficiente con las tres personas que quedan habilitadas", aseguró, pues los tres cabecillas excluidos cuentan con "órdenes de captura que tienen el propósito de ser extraditados", lo que podría dificultar el proceso.El presidente Petro pretende desactivar por medio del diálogo la guerra interna que enfrenta a guerrilleros, paramilitares, narcos y agentes estatales. El Clan insiste en ser tratado como una organización política dado su origen paramilitar y suele negarse a aceptar un sometimiento a la justicia.Según cálculos oficiales, la organización exporta unas 700 toneladas de cocaína anuales desde Colombia, el principal país productor de esa droga según la ONU. El grupo también estaría vinculado con la minería ilegal y el tráfico de migrantes en la frontera con Panamá por la selva del Darién, pese a que sus líderes lo niegan.El abogado del grupo armado, Ricardo Giraldo, aseguró también el martes a Caracol Radio que la decisión les tomó por "sorpresa" y que generará "reparos" dentro de la organización. "Puede ser legal, pero no suena bonito. ¿Con quién van a negociar?", cuestionó.
Juan Carlos Rodríguez, alias Zeus, el militar retirado que murió en una operación policial después de haber trabajado con casi todas las organizaciones criminales durante dos décadas, dejó varios de sus secretos mejor guardados anotados en una libreta. La Unidad Investigativa de Noticias Caracol conoció su contenido y lo revela en exclusiva.(Lea también: Esto revela la libreta pérdida de Zeus: plan de expansión del Clan del Golfo y rearme paramilitar)La agenda de Zeus contiene los secretos de alianzas entre poderosos narcotraficantes, paramilitares e integrantes de la fuerza pública para expandir la organización criminal por todo el país. ¿De dónde salió el dinero?En la década de 1980, las autodefensas del Magdalena Medio, aliadas con los narcos más poderosos de la época e integrantes de la fuerza pública, lograron extender por todo el país el terror paramilitar. Así lo ratificó el exmilitar ante la JEP:Lo que Zeus no dijo, es que más de dos décadas después él era el protagonista de un rearme de idénticas características, que incluía a antiguos jefes paramilitares del Magdalena Medio y algunos narcos de vieja data que están por fuera del radar de las autoridades.De acuerdo con las anotaciones en la libreta, una de las fichas más importantes en el plan de expansión militar de Zeus es Elkin Casarrubia, apodado El Cura o Joaquín. Lleva más de tres décadas en armas, primero, como miembro de la guerrilla del EPL, después se cambió el brazalete y pasó a las autodefensas, organización con la que se desmovilizó cuando era comandante del Bloque Calima; una vez recobró su libertad se rearmó con el Clan del Golfo y, según la libreta de Zeus, hoy tiene funciones claves relacionadas con la financiación del grupo.En la página 89, titulada como Doctor Joaquín, se enumeran tareas como la de recuperar propiedades que estuvieron en poder de Matamba y de alias Siopas; el primero se fugó de la cárcel La Picota y murió en un enfrentamiento con la Policía. Siopas, por su parte, fue uno de los jefes del Clan del Golfo secuestrado y asesinado por la misma organización en un ajuste de cuentas.Por los escritos de Zeus se logra establecer que a Joaquín, que se moviliza por la zona del Chocó, le habrían encomendado la toma del Puerto de Buenaventura. Las notas también tienen referencias sobre los planes de apoderarse del Pacífico y controlar la salida de cocaína hacia Panamá, como lo mencionan en varias partes de la agenda.Entre los apuntes más llamativos está el vínculo directo que Zeus establece entre Joaquín y el que fuera uno de los grupos de narcotraficantes más poderosos del país: el clan de los Cifuentes Villa.Su mayor representante fue Pacho Cifuentes, el piloto de Pablo Escobar que fue asesinado en una guerra con Don Berna. Tres de sus hermanos, Jorge, Alexander y Dolly Cifuentes Villa, fueron extraditados a Estados Unidos y recientemente recobraron la libertad.En la página 49, titulada Hermanos Cifuentes, Zeus escribió los nombres de tres poblaciones en el Chocó, en lo que al parecer sería una zona estratégica para negocios de narcotráfico: Curiche y Punta Ardita, en el municipio de Juradó, ubicados sobre el Pacífico y limítrofes con Panamá. También se refiere a un predio de 145 hectáreas en el caserío de Balboa, en Unguía, Chocó. Precisamente, un desmovilizado de esta estructura declaró recientemente cómo el Clan del Golfo mueve cocaína justo en esta zona del departamento:En esa hoja de la agenda también sobresalen los nombres de dos reconocidos criminales: Felipe Tuluá, el jefe de la banda La Inmaculada en el norte del Valle que está preso, y alias El Cebollero, quien sería el temido comerciante de Medellín vinculado a organizaciones criminales.Zeus también vinculó a Joaquín o El Cura con otro antiguo capo que, según denuncias de las víctimas consultadas por Noticias Caracol, estaría trabajando con este grupo criminal. Se trata de Pedro Ariza, un narco que fue extraditado a Estados Unidos en la década de 1990. Su nombre también aparece como uno de los puntos a tratar en una reunión con tres comandantes de la estructura armada: David o Terror, Galeano y Botalón. Este último fue un reconocido jefe paramilitar que tuvo alianzas con narcotraficantes de marca mayor como Gonzalo Rodríguez Gacha y Diego León Montoya, alias Don Diego. Su verdadero nombre es Arnubio Triana Mahecha. Conoció a Zeus cuando era comandante paramilitar en Puerto Boyacá y realizaron operaciones conjuntas con el Ejército.“Yo estaba dentro del municipio de Bolívar; posteriormente me asignan el municipio de El Peñón, que son dos municipios bastante amplios, es un terreno bastante grande y empiezo a hacer operaciones: operaciones, nada, no encontraba la guerrilla, por un lado me le metía ahí, se me corría. Entonces yo hablo con Botalón y le digo ‘Botalón, aquí hay mucho terreno y esto está… no hay nadie aquí que me ayude y si me hacen presencia y me les muevo para allá, se me corren para el otro lado’, entonces le dije ‘usted porque no hace un esfuerzo y me manda una gente para acá, para poder cubrir terreno que no puedo cubrir, para ver si podemos cazar al cabecilla del frente (11), al cabecilla, a Norbey el del (26), moisés el del frente (11) y Norbey el del frente (26)’, me dijo ‘listo, déjeme ver qué puedo hacer’”, declaró Zeus ante la JEP.En su libreta, el exmilitar anotó que Botalón tiene la función de reactivarse en 23 municipios. También escribió su nombre junto al de alias David o Terror para la realización de foros regionales en lo que sería la estrategia para tratar de ganarse un estatus político.Al menos, en el caso de Botalón, parece que esto funcionó, pues el Gobierno Petro lo nombró gestor de paz junto a 18 jefes paramilitares.Iván Madero, el representante de Credhos, señaló que Botalón todavía no ha saldado su deuda con las víctimas: “Sabemos que fue un jefe paramilitar del Magdalena Medio, con un control real de municipios como Cimitarra, Puerto Parra, de Landázuri y otros municipios, como San Vicente y El Carmen, y que hoy estas víctimas, por ejemplo, las del municipio Cimitarra, el de mayor víctimas en el departamento de Norte de Santander, le reclaman la verdad a Botalón. Igualmente, la devolución de tierras, porque curiosamente estos jefes paramilitares quedaron con muchas extensiones y muchas hectáreas de tierra que fueron despojadas a los campesinos a sangre y fuego. Hay preocupación en estos municipios como Puerto Parra, Cimitarra y Landázuri, donde está el resurgimiento del paramilitarismo, así lo dicen las comunidades, con la presencia de este nuevo bloque que dirigía Zeus y que creen que va a haber una reactivación del conflicto armado y que van a ser nuevamente revictimizados como tal”.¿Por qué Zeus mencionó a Rito Alejo del Río en su agenda?En las notas de Zeus sobresale el nombre de un oficial retirado ampliamente conocido para la opinión pública: el general Rito Alejo del Río, condenado a 25 años de prisión por el asesinato de un líder social y quien recobró su libertad hace seis años tras acogerse a la JEP.En una de las páginas de la agenda de Zeus, la 82, hace una relación de armamento y en el cuarto punto aparecen las palabras "reunión Rito". En otra hoja, la 44, está escrito "Rito Alejo" y más abajo "estatus político". En esta anotación, Zeus puso además "Rito Alejo-valle-lotes".Ante la JEP, Zeus contó que conoció a Del Río cuando coincidieron en la Brigada XVII en Urabá. Esa unidad es reconocida por sus alianzas con grupos paramilitares y un largo historial de violaciones de derechos humanos en la década de 1990.“Cuando yo llegué a Cali y se dieron cuenta de que yo había llegado, me hicieron sacar de esa compañía, me lo percibí, me di cuenta fue después de que al Cartel de Cali no le cayó en gracia que me tuvieran ubicado en esa compañía y salí, de ocho días recibí mi destacamento, compañía (c), la compañía Charry en el batallón estaba en Urabá. Para esa época estaba mi general Rito Alejo del Río, comandante de la brigada XVII; y estaba mi coronel Navas Pardo, comandante del Batallón Voltígeros, y estaba el comandante del batallón de fuerzas especiales, mi mayor Muñoz, y yo llegué a la compañía Charry que estaba destacada en San José de Apartadó. Dos compañías estábamos ahí cuidando a la población civil de unas masacres y unos atentados que había sufrido la población por grupos de autodefensas para esa época”, declaró.Aunque en la JEP, Zeus jamás mencionó algo que comprometiera al general Del Río e, incluso, trató de poner distancia con él, la realidad es que su libreta demostraría que seguían en contacto.Sus apuntes confirman una preocupante realidad que viene siendo alertada por diferentes sectores, especialmente, la población civil: el rearme de paramilitares y la expansión del Clan del Golfo de la mano de narcotraficantes e integrantes de la fuerza pública.
Juan Carlos Rodríguez, alias Zeus, el militar retirado que murió en una operación policial después de haber trabajado con casi todas las organizaciones criminales durante dos décadas, dejó varios de sus secretos mejor guardados anotados en una libreta. La Unidad Investigativa de Noticias Caracol revela el contenido de la agenda, que incluye planes de expansión del Clan del Golfo y pagos a oficiales de la fuerza pública.(Lea también: Las revelaciones de la agenda de Zeus: habla de alianzas entre narcotraficantes y paras)El documento de casi 100 páginas contiene mapas, cuentas de armamento y de narcotráfico, nombres de socios, temas de reuniones, planes cifrados de operaciones criminales y la hoja de ruta de una expansión militar del Clan del Golfo para apoderarse de las rentas criminales en todo el país y al mismo tiempo tratar de pescar en la paz total.La libreta perdida constituye una pieza clave para demostrar que mientras Zeus entregaba declaraciones como esta ante la Jurisdicción Especial para la Paz, seguía siendo miembro activo de la organización criminal más grande del país y la asesoraba militar y políticamente en sus intentos de negociación con el Gobierno.De hecho, en sus notas queda claro que Zeus tenía línea directa con Javier, el más reciente alias con el que se conoce a Chiquito Malo, jefe del Clan del Golfo. En una de las páginas se lee: “Don Javier. Recibe el jueves llegada a Carepa, yo tengo finca ya para que lleguen”.La nota habría sido escrita en marzo de 2023, la misma época en que Javier o Chiquito Malo apareció en forma de holograma en un video rodeado de los comandantes, en una de las tantas tensiones con el Gobierno por la paz total.Zeus escribió algunos derroteros extraídos de una reunión con varios jefes de la organización frente a lo que sería la estrategia política:"Política de tierras. Ganarse al pueblo.Exposición político social.Microtráfico-ponal. Controlar.Ojo con narcóticos y trago en tropa-desescalar.Los antiguos jefes AUC ya fueron, ya no. H-Macaco-Iguano-Alemán.No permitir gusanos.Carácter, controlar y carisma para liderar.Importante política social, trabajar con las comunidades. Asesores para líderes.”Esos lineamientos coinciden con lo que investigadores de la fundación Ideas para la Paz han encontrado en territorio. Así lo señala Sebastián Londoño: “Dentro de la reestructuración del actual ejército gaitanista, uno de los cambios más importantes es la creación de un comandante político”.Zeus tiene anotaciones de 2023, en donde dejó rastro de su participación en la creación de un estado mayor del Clan del Golfo y el cambio de nombre de esa organización criminal: pasó de llamarse Autodefensas Gaitanistas de Colombia a Ejército Gaitanista de Colombia, una fachada que tuvo como propósito buscar el estatus político para sus comandantes y desligarse de la sombra del paramilitarismo."Ellos han insistido en sus comunicados públicos: no somos paramilitares, eso explica en gran medida la batalla por ser reconocidos como ellos se autodenominan, ejército gaitanista, por los retos que eso implica para un proceso de negociación con una organización que llega en su momento más fuerte", explica Londoño.Zeus también se refirió varias veces a Pedro Niño, el abogado que ingresó a la cárcel de La Picota junto a Juan Fernando Petro, hermano de Gustavo Petro, en plena campaña presidencial. Niño trabajó con el hermano del mandatario en una ONG y, en enero de 2023, fue designado como vocero del Clan del Golfo a través de una resolución expedida por el Gobierno, la cual fue revocada en medio de denuncias contra el jurista por supuestas exigencias de dinero. Estos hechos fueron de público conocimiento. Él lo ha negado insistentemente.Noticias Caracol buscó a Niño, pero no quiso referirse a su aparición en la libreta de Zeus.A la par de la estrategia política, la agenda evidencia que la verdadera prioridad del exuniformado era fortalecer militarmente al Clan del Golfo y llevarlo hacia regiones en donde aún no tenían el control total.Los triángulos que están en una de las páginas de la libreta de Zeus contienen las iniciales de lo que él proyectaba serían los jefes de ocho estructuras armadas que se distribuirían por todo el país:J: alias Javier o Chiquito MaloW: alias Willington o GonzalitoR: alias Rodrigo FlechasJ: alias Loaquín o El CuraC: alias ChirimoyaD: alias David o TerrorA: alias AbrahamA alias Javier o Chiquito Malo y a alias Chirimoya, el Gobierno les reconoció mediante resolución el carácter de voceros del Clan del Golfo para diálogos de paz. En cuanto a El Cura y Rodrigo Flechas tienen suspendidas las órdenes de captura.Los puntos 1, 2 y 3 de la libreta de Zeus corresponderían a Antioquia, Caldas y Tolima, zonas en las que tiene injerencia el Clan del Golfo. El plan del exmilitar contemplaba el fortalecimiento de estructuras armadas en Santander, Boyacá y Meta, así como en Cundinamarca, Chocó y Buenaventura.La zona desde donde se está gestando esta expansión es el Magdalena Medio y con el reagrupamiento de antiguos jefes paramilitares de esa región. Así lo confirmó Iván Madero, representante de la ONG Codhes, que hace presencia en esa parte del país."Sí se ha observado una expansión como tal que inicia en cabeza de alias Zeus y que tenía como la misión de ir recomponiendo en el territorio la presencia del Clan del Golfo como un nuevo bloque. Allí se han encontrado con una presencia de antiguas Autodefensas Unidas de Colombia o antiguos paramilitares. (...) Lo que hacen es un reagrupamiento", señaló.Zeus conseguía armamento, uniformes y otros materiales para el Clan del GolfoSegún las notas, Zeus fue el encargado de conseguir con sus contactos en diferentes unidades militares, todo tipo de armamento y munición para proveer a los bloques. En algunos de los gráficos aparecen unidades tan emblemáticas como Tolemaida y el Comando Conjunto de Operaciones Especiales del Ejército, Cecoes.En la agenda del exmilitar hay decenas de referencias, como cuentas de armamento. En una de las páginas se refiere a alias David, también conocido Terror. Su nombre real es Ovidio Izasa y es el hijo de Ramón Isaza, uno de los fundadores del paramilitarismo. Según las anotaciones, por ejemplo, el 16 de marzo de 2024 le hizo entrega de 19 fusiles R15, el 31 de marzo le dio 18 fusiles galil con 36 proveedores y 12 fusiles AK-47 con 24 proveedores.En la página 81 se registró la entrega de 83.400 cartuchos para diferentes tipos de armas. Zeus también se encargaba de conseguir motos, camionetas y material de intendencia, como uniformes, botas, chalecos, radios y hasta repetidores de señal.Todo esto fue posible para Zeus gracias a una compleja red de corrupción en la fuerza pública. De hecho, en sus apuntes hay pistas sobre posibles pagos a oficiales, incluyendo coroneles y generales, como se observa en la página 11:El señor arroz de las señoras: 200 al mes, 2 meses 400.El señor Chava j1 ns: 100 al mes, 2 meses 200.El gráfico en la parte inferior correspondería a un mapa que coincide con la zona de operaciones de la regional 5 de la Policía, que abarca Santander, Norte de Santander, Magdalena Medio y Arauca. Las autoridades verifican si esta referencia tiene relación con los nombres de recientes comandantes en esa regional y si las cifras escritas son pagos de la organización.Las anotaciones de la libreta de Zeus van hasta el 10 de abril de 2024, el día en que fue capturado transportando casi 17.000 cartuchos de fusil. El arsenal provenía de la industria militar colombiana (Indumil), según las inscripciones.La libreta de Zeus estuvo desaparecida hasta ahora, que Noticias Caracol tuvo acceso a la totalidad de su contenido.El medio noticioso consultó varios peritos grafólogos que cotejaron la agenda con documentos oficiales de Zeus ante la Jurisdicción Especial para la Paz y ratificaron su autenticidad.“Estas mismas características son encontradas en el formato de aportación de información de la JEP y en elementos que tenemos como indubitados, que han sido recuperados de información personal de Juan Carlos Rodríguez Agudelo, alias Zeus, de tal motivo que técnicamente se puede establecer que corresponde a la misma escritura, el mismo gesto gráfico como técnicamente se puede desarrollar, lo cual genera una identidad grafica como tal”, afirmó el perito Carlos Alberto.Un mes después de su captura, Zeus se fugó de la cárcel de Cúcuta. Dos meses más tarde, el exmilitar murió en un enfrentamiento con la Policía en el corregimiento de Aquitania, en San Francisco, Antioquia, junto a ocho de sus hombres más cercanos.(Lea también: Alias Zeus, abatido en Antioquia, se había fugado hace unos meses: ¿cómo logró escaparse?)¿Quiénes financiaron la expansión criminal que anotó Zeus en su agenda?Paralelo a la estrategia política, la agenda de Zeus contiene los secretos de alianzas entre poderosos narcotraficantes, paramilitares e integrantes de la fuerza pública para expandir la organización criminal por todo el país. ¿De dónde salió el dinero?En la década de 1980, las autodefensas del Magdalena Medio, aliadas con los narcos más poderosos de la época e integrantes de la fuerza pública, lograron extender por todo el país el terror paramilitar. Así lo ratificó el exmilitar ante la JEP:Lo que Zeus no dijo, es que más de dos décadas después él era el protagonista de un rearme de idénticas características, que incluía a antiguos jefes paramilitares del Magdalena Medio y algunos narcos de vieja data que están por fuera del radar de las autoridades.(Lea también: Confesiones de alias Zeus ante JEP: develó vínculos entre paramilitares y fuerzas del Estado)De acuerdo con las anotaciones en la libreta, una de las fichas más importantes en el plan de expansión militar de Zeus es Elkin Casarrubia, apodado El Cura o Joaquín. Lleva más de tres décadas en armas, primero, como miembro de la guerrilla del EPL, después se cambió el brazalete y pasó a las autodefensas, organización con la que se desmovilizó cuando era comandante del Bloque Calima; una vez recobró su libertad se rearmó con el Clan del Golfo y, según la libreta de Zeus, hoy tiene funciones claves relacionadas con la financiación del grupo.En la página 89, titulada como Doctor Joaquín, se enumeran tareas como la de recuperar propiedades que estuvieron en poder de Matamba y de alias Siopas; el primero se fugó de la cárcel La Picota y murió en un enfrentamiento con la Policía. Siopas, por su parte, fue uno de los jefes del Clan del Golfo secuestrado y asesinado por la misma organización en un ajuste de cuentas.Por los escritos de Zeus se logra establecer que a Joaquín, que se moviliza por la zona del Chocó, le habrían encomendado la toma del Puerto de Buenaventura. Las notas también tienen referencias sobre los planes de apoderarse del Pacífico y controlar la salida de cocaína hacia Panamá, como lo mencionan en varias partes de la agenda.Entre los apuntes más llamativos está el vínculo directo que Zeus establece entre Joaquín y el que fuera uno de los grupos de narcotraficantes más poderosos del país: el clan de los Cifuentes Villa.Su mayor representante fue Pacho Cifuentes, el piloto de Pablo Escobar que fue asesinado en una guerra con Don Berna. Tres de sus hermanos, Jorge, Alexander y Dolly Cifuentes Villa, fueron extraditados a Estados Unidos y recientemente recobraron la libertad.En la página 49, titulada Hermanos Cifuentes, Zeus escribió los nombres de tres poblaciones en el Chocó, en lo que al parecer sería una zona estratégica para negocios de narcotráfico: Curiche y Punta Ardita, en el municipio de Juradó, ubicados sobre el Pacífico y limítrofes con Panamá. También se refiere a un predio de 145 hectáreas en el caserío de Balboa, en Unguía, Chocó. Precisamente, un desmovilizado de esta estructura declaró recientemente cómo el Clan del Golfo mueve cocaína justo en esta zona del departamento:En esa hoja de la agenda también sobresalen los nombres de dos reconocidos criminales: Felipe Tuluá, el jefe de la banda La Inmaculada en el norte del Valle que está preso, y alias El Cebollero, quien sería el temido comerciante de Medellín vinculado a organizaciones criminales.Zeus también vinculó a Joaquín o El Cura con otro antiguo capo que, según denuncias de las víctimas consultadas por Noticias Caracol, estaría trabajando con este grupo criminal. Se trata de Pedro Ariza, un narco que fue extraditado a Estados Unidos en la década de 1990. Su nombre también aparece como uno de los puntos a tratar en una reunión con tres comandantes de la estructura armada: David o Terror, Galeano y Botalón. Este último fue un reconocido jefe paramilitar que tuvo alianzas con narcotraficantes de marca mayor como Gonzalo Rodríguez Gacha y Diego León Montoya, alias Don Diego. Su verdadero nombre es Arnubio Triana Mahecha. Conoció a Zeus cuando era comandante paramilitar en Puerto Boyacá y realizaron operaciones conjuntas con el Ejército.“Yo estaba dentro del municipio de Bolívar; posteriormente me asignan el municipio de El Peñón, que son dos municipios bastante amplios, es un terreno bastante grande y empiezo a hacer operaciones: operaciones, nada, no encontraba la guerrilla, por un lado me le metía ahí, se me corría. Entonces yo hablo con Botalón y le digo ‘Botalón, aquí hay mucho terreno y esto está… no hay nadie aquí que me ayude y si me hacen presencia y me les muevo para allá, se me corren para el otro lado’, entonces le dije ‘usted porque no hace un esfuerzo y me manda una gente para acá, para poder cubrir terreno que no puedo cubrir, para ver si podemos cazar al cabecilla del frente (11), al cabecilla, a Norbey el del (26), moisés el del frente (11) y Norbey el del frente (26)’, me dijo ‘listo, déjeme ver qué puedo hacer’”, declaró Zeus ante la JEP.En su libreta, el exmilitar anotó que Botalón tiene la función de reactivarse en 23 municipios. También escribió su nombre junto al de alias David o Terror para la realización de foros regionales en lo que sería la estrategia para tratar de ganarse un estatus político.Al menos, en el caso de Botalón, parece que esto funcionó, pues el Gobierno Petro lo nombró gestor de paz junto a 18 jefes paramilitares.Iván Madero, el representante de Credhos, señaló que Botalón todavía no ha saldado su deuda con las víctimas: “Sabemos que fue un jefe paramilitar del Magdalena Medio, con un control real de municipios como Cimitarra, Puerto Parra, de Landázuri y otros municipios, como San Vicente y El Carmen, y que hoy estas víctimas, por ejemplo, las del municipio Cimitarra, el de mayor víctimas en el departamento de Norte de Santander, le reclaman la verdad a Botalón. Igualmente, la devolución de tierras, porque curiosamente estos jefes paramilitares quedaron con muchas extensiones y muchas hectáreas de tierra que fueron despojadas a los campesinos a sangre y fuego. Hay preocupación en estos municipios como Puerto Parra, Cimitarra y Landázuri, donde está el resurgimiento del paramilitarismo, así lo dicen las comunidades, con la presencia de este nuevo bloque que dirigía Zeus y que creen que va a haber una reactivación del conflicto armado y que van a ser nuevamente revictimizados como tal”.¿Por qué Zeus mencionó a Rito Alejo del Río en su agenda?En las notas de Zeus sobresale el nombre de un oficial retirado ampliamente conocido para la opinión pública: el general Rito Alejo del Río, condenado a 25 años de prisión por el asesinato de un líder social y quien recobró su libertad hace seis años tras acogerse a la JEP.En una de las páginas de la agenda de Zeus, la 82, hace una relación de armamento y en el cuarto punto aparecen las palabras "reunión Rito". En otra hoja, la 44, está escrito "Rito Alejo" y más abajo "estatus político". En esta anotación, Zeus puso además "Rito Alejo-valle-lotes".Ante la JEP, Zeus contó que conoció a Del Río cuando coincidieron en la Brigada XVII en Urabá. Esa unidad es reconocida por sus alianzas con grupos paramilitares y un largo historial de violaciones de derechos humanos en la década de 1990.“Cuando yo llegué a Cali y se dieron cuenta de que yo había llegado, me hicieron sacar de esa compañía, me lo percibí, me di cuenta fue después de que al Cartel de Cali no le cayó en gracia que me tuvieran ubicado en esa compañía y salí, de ocho días recibí mi destacamento, compañía (c), la compañía Charry en el batallón estaba en Urabá. Para esa época estaba mi general Rito Alejo del Río, comandante de la brigada XVII; y estaba mi coronel Navas Pardo, comandante del Batallón Voltígeros, y estaba el comandante del batallón de fuerzas especiales, mi mayor Muñoz, y yo llegué a la compañía Charry que estaba destacada en San José de Apartadó. Dos compañías estábamos ahí cuidando a la población civil de unas masacres y unos atentados que había sufrido la población por grupos de autodefensas para esa época”, declaró.Aunque en la JEP, Zeus jamás mencionó algo que comprometiera al general Del Río e, incluso, trató de poner distancia con él, la realidad es que su libreta demostraría que seguían en contacto.Sus apuntes confirman una preocupante realidad que viene siendo alertada por diferentes sectores, especialmente, la población civil: el rearme de paramilitares y la expansión del Clan del Golfo de la mano de narcotraficantes e integrantes de la fuerza pública.
Fueron judicializados tres militares activos del Ejército Nacional por presuntamente robar municiones de batallones y venderlas a los grupos armados del Clan del Golfo y de las disidencias de las FARC.(Lea también: Capturan a tres militares por presunto tráfico de material de guerra)Militares alteraban información de inventarios para ocultar el faltante de municionesSegún la investigación de la Fiscalía General de la Nación, los uniformados se apropiaban de hasta 40.000 cartuchos cada mes y los enviaban a los grupos criminales, a través de contactos externos, escondidos entre baterías de carros y buses de servicio de transporte interdepartamental a Cauca y Arauca, entre otros departamentos.Como pago, los militares recibían consignaciones a cuentas personales y transferencias de dinero a billeteras virtuales, señaló el ente acusador. Habrían recaudado por esa actividad ilegal entre 1.500 y 2.000 millones de pesos al año.La Fiscalía dijo que los militares, en el desempeño de sus funciones, habrían ingresado de manera abusiva a los sistemas misionales del Ejército Nacional para alterar la información de inventarios y evitar que fuera detectado el faltante de munición.(Lea también: Capturan a tres militares por atentado del ELN en Anorí que dejó 5 uniformados muertos)Los uniformados capturados por estos hechos son: el sargento viceprimero José Arturo Cavarique Acosta, el sargento segundo Jhorman Francisco Torres Parra y el suboficial José Arturo López Astudillo. Fueron detenidos en diligencias realizadas por el CTI, con apoyo de unidades del Ejército Nacional, en el Fuerte Militar de Tolemaida, ubicado en Nilo, Cundinamarca; el Hospital Militar de Bogotá y el Comando de Operaciones Logísticas N°2 del Ejército Nacional en Cali, en Valle del Cauca.Los tres militares fueron imputados por los delitos de concierto para delinquir, tráfico, fabricación o porte ilegal de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas; peculado por apropiación, enriquecimiento ilícito de particulares, lavado de activos, violación de datos personales y acceso abusivo a un sistema informático. Aunque ninguno aceptó los cargos, un juez decidió cobijarlos con medida de aseguramiento en un centro penitenciario.
En medio del fuego cruzado y entre combates de la fuerza pública contra grupos armados organizados en Colombia, el mayor del Ejército Jimmer Acuña, un piloto experto de Black Hawk, contó los estremecedores momentos que vivió cuando su aeronave, en pleno vuelo, recibió impactos de ametralladora.Con 22 años de experiencia en el Ejército Nacional y 13 dedicados exclusivamente a la aviación, el mayor Acuña, piloto instructor de helicópteros UH-60, ha sido uno de los principales líderes en operaciones de alto impacto en el país.Entre las operaciones más importantes en las que ha participado, el militar destaca la operación Jinete, realizada en el peaje Tunía, en el municipio de Piendamó, Cauca, donde su aeronave recibió múltiples impactos de bala mientras transportaba diez soldados a bordo para apoyar la misión.(Lea también: Detalles desconocidos del mortal accidente de 4 militares que descendían por cuerda de helicóptero)Durante la operación, 2 helicópteros Black Hawk también fueron atacados. “En este sector fuimos atacados por fuego de ametralladora y por fuego mortero hechizo, artefactos explosivos improvisados que fueron lanzados hacia la aeronave, la cual sufrió diferentes impactos, alrededor de 27”, sostuvo el mayor.En medio de esta operación, las tropas fueron atacadas con drones y artefactos explosivos. La aeronave del mayor Acuña tuvo que mantenerse en el aire, recuperar el control y dirigirse de inmediato hacia Popayán para a salvo la tripulación y así continuar con la misión.“El piloto mío sufrió una afectación en el rostro por parte de esquirlas que tuvimos”, explicó el mayor."Me encomiendo a Dios": piloto del EjercitoLa operación Jinete no ha sido la única operación en la que este piloto del Ejército ha estado al frente. Recientemente, en la operación Perseo, cuando al menos 1.400 uniformados entraron a lo más profundo del corregimiento El Plateado, en el Cauca, el mayor, luego de la segunda intervención aérea, identificó cómo francotiradores disparaban contra su helicóptero con ametralladoras.Pese a su habilidad física y mental, un riguroso entrenamiento y una capacidad inmediata de maniobrar, esos segundos clave también son decisivos para pensar en que podrían ser sus últimos minutos de vida.(Lea también: Otro golpe a las disidencias de las FARC: capturan a nueve delincuentes y rescatan a dos menores)“Cada vez que yo desarrollo este tipo de misiones, que yo sé que son bastante difíciles, primero me encomiendo ante Dios con toda mi tripulación, pienso en mis hijos y en mi familia. Ellos son nuestro motor, día a día, para lograr cumplir las misiones que son en pro de nuestra Colombia, de nuestra patria. Todos queremos vivir en una Colombia en paz”, puntualizó el mayor.Con compromiso por su trabajo, hoy sigue recorriendo el cielo, en medio de operaciones militares, con meses de inteligencia, que también son de alto riesgo para su tripulación y las tropas que moviliza.
En las últimas semanas se han registrado varios ataques a sucursales de la empresa Supergiros en la región Caribe de Colombia. Atentados en Barranquilla y Luruaco, en el departamento del Atlántico, dejaron con heridas a los empleados de la empresa, mientras que, en Bosconia (Cesar), Marlén Mozo, trabajadora de la sede de la compañía, perdió la vida.Autoridades lograron la captura de miembros del Clan del Golfo, quienes estarían involucrados en al menos uno de los ataques a la empresa. Lo que han solicitado los delincuentes es que Supergiros cierre sus puertas en las sucursales del Caribe; por ello, la organización empresarial ha tomado una difícil decisión.Con panfletos amenazantes, los criminales han hecho cerrar a la fuerza varios locales y en otros casos han dejado la advertencia: “El que permanezca en su sitio de trabajo o se encuentre abierto al ver esta nota, que se atenga a las consecuencias”.¿Cuál fue la decisión de Supergiros tras los ataques y amenazas?Ante el inminente riesgo de los trabajadores de la compañía que laboran en la zona norte de Colombia, los directivos de la empresa se vieron obligados a tomar una decisión para intentar salvaguardar las vidas de los empleados de los sectores amenazados.Cumpliendo con las peticiones de los delincuentes, Supergiros determinó realizar el cierre indefinido de al menos 3.000 sucursales de venta y atención al cliente en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Sucre, César, Magdalena y Guajira.Se prevé que este anuncio genere impactos negativos en las comunidades, pues la compañía moviliza la economía en municipios y ciudades alejados, a través del pago de facturas y servicios públicos, giros de dinero, envíos de mercancía, entre otros servicios.Supergiros aseguró, a través de su abogado, que las personas que más se han visto afectadas por estos hechos violentos son las trabajadoras mujeres y madres cabeza de hogar.“Es escabroso lo que nos está pasando, porque sobre todo están atentando contra nuestras trabajadoras que son madres cabeza de hogar. Este grupo criminal lo que está haciendo prácticamente es exterminar a nuestras trabajadoras. No hay ninguna exigencia económica hasta ahora, simplemente dicen: ‘No abren los puntos’. La situación es en el Atlántico, Sucre, Bolívar, Magdalena, Cesar, La Guajira y todo el andén pacífico”, ratificó Jhony Mena, abogado de Supergiros, en diálogo con la Emisora Atlántico.La empresa, junto a la Defensoría del Pueblo y otros organismos, ha condenado los ataques perpetrados contra civiles inocentes y espera que las autoridades avancen con prontitud en las investigaciones para detener estas intimidaciones y permitirles a los trabajadores tener un ingreso para subsistir.“Rechazamos el constreñimiento de grupos armados ilegales en Sucre y sur de Bolívar que afectan el derecho al trabajo y la vida de quienes operan puntos de atención de Supergiros, en su mayoría mujeres. Es urgente tomar medidas contundentes para frenar este accionar”, comentó la Defensoría del Pueblo en su cuenta de X.
La Policía Metropolitana de Barranquilla, a través del Gaula Élite Metropolitano, capturó a tres presuntos integrantes del Clan del Golfo -alias 'Chespi', 'Naguthd' y 'Douglas'-, quienes estarían involucrados en ataques e intimidaciones a un punto de venta de la empresa Supergiros.El resultado del operativo se dio gracias al trabajo investigativo que permitió la ubicación de propiedades en el barrio Siape y en el corregimiento La Playa, en Barranquilla, donde al parecer el grupo armado organizado estaba guardando armas de fuego.(Lea también: Nuevo atentado contra Supergiros deja herida a una de sus empleadas, esta vez en Barranquilla).En coordinación con la Fiscalía, se realizaron allanamientos en los que se logró la incautación de dos armas de fuego, panfletos extorsivos y tres teléfonos celulares que ahora son materia de análisis por parte de personal especializado.Por tal motivo, los capturados son investigados por el delito de fabricación, tráfico o porte ilegal de armas de fuego. Es de anotar que 'Chespi' habría asumido el liderazgo de la estructura en barrios como Siape y Las Flores luego de que la Policía ejecutara la Operación Odiseo II, con la cual se capturaron los cabecillas de zona del grupo armado organizado.Además, el proceso investigativo y los elementos materiales de prueba incautados permiten inferir que estas personas serían las presuntas responsables de intimidaciones a la empresa de chance en la capital del Atlántico. Ataque en Supergiros de Barranquilla En la mañana del pasado sábado, 23 de noviembre, se registró en Barranquilla un nuevo atentado a un punto de venta de la empresa Supergiros. La empleada herida fue remitida a un centro de salud que se encuentra ubicado a pocos metros del local donde trabaja.Información preliminar señala que el ataque fue propiciado por hombres en moto que abrieron fuego contra el vidrio que cubría a la trabajadora en el interior del establecimiento ubicado en la avenida Murillo, del barrio La Victoria, al sur de la ciudad.(Lea también: Masacre en Barranquilla: ataque armado dejó cuatro muertos y dos heridos).En imágenes que circulan a través de redes sociales se evidencia que la ventana recibió dos impactos de bala. Además, la información recopilada por Blu Radio sostiene que arrojaron un panfleto que decía: “El que permanezca en su sitio de trabajo o se encuentre abierto al ver esta nota, que se atenga a las consecuencias”. Este atentado se suma a otros dos ataques registrados en las últimas semanas a empresas de Supergiros: uno ocurrió en Bosconia, Cesar, en el que la empleada Marlén Mozo perdió la vida. El otro pasó en Luruaco, departamento del Atlántico, y dejó gravemente herida a Merly Salas Rodríguez.La Defensoría del Pueblo se refirió sobre estos ataques en su cuenta de X y escribió lo siguiente: "Rechazamos el constreñimiento de grupos armados ilegales en Sucre y Sur de Bolívar que afectan el derecho al trabajo y la vida de quienes operan puntos de atención de Supergiros, en su mayoría mujeres. Es urgente tomar medidas contundentes para frenar este accionar".Se calcula que tres mil locales de la red de la empresa que presta servicios de giros y pago de servicios públicos y que opera como corresponsal bancario en los municipios más apartados de Colombia cerraron sus puertas ante la falta de garantías para operar, de acuerdo con el medio EmiAtlantico."Llegan en grupos de dos o tres y dan la orden de cierre dejando ver armas de fuego", sostienen las colaboradoras a la emisora mencionada quienes, minutos después, cierran los locales.
Las autoridades de Montería llevaron a cabo el proceso de extinción de dominio a seis inmuebles en Montería y Cereté (Córdoba), que eran utilizados por el grupo armado Clan del Golfo para el expendio de alucinógenos.>>> También puede leer: Cabecilla del Clan del Golfo fue capturado en pleno partido de fútbol: "¡Golazo de la justicia!"El procedimiento estuvo liderado por miembros de la Sijín de la Policía Metropolitana de Montería con el apoyo de la Fiscalía 70 Especializada en las viviendas ubicadas en las comunas 1 y 6 de Montería, y en los barrios Siete de Agosto y Santa María, de Cereté.Durante los operativos se logró la incautación de seis armas de fuego, que presuntamente habrían sido utilizadas para delinquir; 300 kilos de cocaína, otros tipos de drogas sintéticas y hasta materia prima para la producción de sustancias ilícitas y explosivos como la pentonita.En esas seis casas, las autoridades ya habían llevado a cabo en 2023 varias diligencias de registro y allanamiento. En medio de los operativos se efectuó la captura de cinco importantes cabecillas del grupo criminal, entre ellos alias Pico, quien lideraba la estructura criminal Javier Yepes Cantero, extensión del Clan del Golfo.“Se determinó que los capturados utilizaban estos inmuebles para el expendio de estupefacientes, con el fin de financiar su actividad delictiva", sostuvo la Policía de Montería.Las edificaciones que están avaluadas en más de 780 millones de pesos quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE). Esta operación constituye un fuerte golpe al Clan del Golfo, pues se logró la incautación y cierre de unas de sus principales fuentes de ingresos ilícitos y sede delincuencial.Las autoridades esperan continuar desmantelando las operaciones ilegales del Clan del Golfo, que ha tenido una significativa injerencia en los últimos años en Córdoba.>>> También puede leer: Ejército da de baja a integrante del Clan del Golfo y libera a un líder social y una menor
El asesinato de Marlen Fernanda Mozo Jiménez, de 18 años, sigue causando indignación en el municipio de Bosconia, departamento del Cesar. Sicarios la mataron a sangre fría luego de que le habían dejado a ella y a sus compañeros una nota advirtiéndoles que “no abran mañana”. El crimen se ultimó el pasado 4 de noviembre.>>> Le puede interesar: Asesinan en Bosconia a Marlen Mozo, empleada de Supergiros, y le dejan un panfletoLas autoridades manejan la hipótesis de que este asesinato habría sido orquestado por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia. Además, en video quedó grabado como un criminal llegó y, sin mediar palabra, desenfundó un arma de fuego, apuntándole directamente a la joven.Coljuegos y Asopostal rechazan asesinato de Marlen MozoA través de un comunicado de prensa, Coljuegos expuso que rechaza el homicidio de Marlen Mozo: “Coljuegos lamenta profundamente y rechaza de manera tajante el asesinato de Marlen Fernanda Mozo, trabajadora de la empresa Supergiros, quien, el pasado 4 de noviembre, fue víctima de sicariato mientras trabajaba en un punto de venta del municipio de Bosconia, Cesar. Este crimen, que enluta a su familia, amigos y compañeros de trabajo, es un acto de violencia inaceptable que no debe tener cabida en nuestra sociedad”.Asimismo, la entidad reiteró su compromiso con el bienestar y la seguridad de todos los trabajadores que hacen parte del sector de los juegos de suerte y azar.Además, frente a las intimidaciones que han realizado los grupos al margen de la ley, Coljuegos mencionó que “rechazamos las intimidaciones de los grupos armados y estructuras delincuenciales en contra de empresas del sector de juegos de suerte y azar como Supergiros”. Las intimidaciones a las que se refieren es a un panfleto escrito a mano en el que se lee: "EGC presente. Les hacemos llegar este mensaje a todos los Supergiro de Bosconia y a sus alrededores. Tienen que estar cerrados. De no acatar las órdenes, tendrán que sufrir las consecuencias".Por su parte, Asopostal también condenó este crimen y advirtió que las Autodefensas Gaitanistas de Colombia “advierten con esta acción (el crimen de Marlen Mozo) a todos los locales de Supergiros de Bosconia que deben cumplir los horarios establecidos por este grupo o sufrirán las consecuencias”.Igualmente, la empresa de mensajería expresó “nuestro más contundente rechazo y consternación por este cruel asesinato. Lamentamos profundamente la pérdida inadmisible de una joven de tan solo dieciocho años con toda su vida y sueños por delante y extendemos nuestras más sinceras condolencias a sus familiares, amigos y colegas en este difícil momento”.Exige que las autoridades competentes den celeridad en la investigación del asesinato de Marlen Mozo y que tanto el presidente Gustavo Petro como los ministros de la cartera de Defensa e Interior “revisen con urgencia las políticas de manejo del orden público en los municipios donde organizaciones criminales están asumiendo el control de manera alarmante. Actualmente, estas zonas están quedando bajo el dominio de grupos ilegales, y es imperativo que el Estado asuma nuevamente la autoridad y garantice la seguridad”.>>> Le recomendamos leer: Con este video, buscan a los asesinos de Marlen Mozo, trabajadora de Supergiros en Bosconia
Sigue la consternación en el departamento de Cesar por el asesinato de Marlen Mozo, joven trabajadora de Supergiros. Detrás del crimen, perpetrado en el municipio de Bosconia, habría una retaliación de bandas criminales por el no pago de extorsiones. >> En otras noticias del Cesar: comerciante fue secuestrado en AguachicaEn el siguiente video se observa el momento del homicidio. El sicario llegó al local de Supergiros, cubriendo su rostro con la capucha de una chaqueta, y le disparó a la víctima. Antes de huir, arrojó un panfleto sobre el escritorio. El documento contenía amenazas contra Supergiros"Dos sujetos en motocicleta llegaron al establecimiento. Uno de estos, sin mediar palabra, acciona un arma de fuego en contra de la humanidad de la joven, a su vez dejando un panfleto donde atribuyen el hecho al grupo criminal AGC", Autodefensas Gaitanistas de Colombia, precisó el coronel Eduardo Chamorro, comandante de la Policía del Cesar.Marlen Fernanda Mozo Jiménez, de 19 años, murió de forma instantánea. Ante la mirada atónica y el pánico de dos clientes que se encontraban en el lugar, cayó desplomada y no pudieron trasladarla a un hospital.Locales de Supergiros, cerrados en varios municipiosLa joven llevaba seis meses trabajando como colaboradora de Supergiros. La principal hipótesis que manejan el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía y la Policía Nacional es una venganza por no pagar extorsiones. "Nos reunimos para tomar unas decisiones administrativas que coadyuven a identificar y esclarecer este hecho en el municipio de Bosconia, proponiendo hasta 40 millones de pesos de recompensa", subrayó Eduardo Esquivel López, secretario de Gobierno del Cesar.El asesinato, efectuado a sangre fría, deja al descubierto la difícil situación que están padeciendo los comerciantes en ese departamento por cuenta de delincuentes que extorsionan, amenazan y matan sin piedad. El panorama es particularmente crítico en los municipios de Bosconia, Astrea, Chimichagua y Chiriguaná.Como medida de precaución, varias oficinas de Supergiros permanecen cerradas. "En esas poblaciones, como son puntos críticos y tienen una situación de orden público muy delicada, pues no tomamos el riesgo porque efectivamente sería exponer a nuestros colaboradores, exponer a nuestro personal humano, que es lo más importante para nosotros", afirmó Jhony Mena Herrera, asesor jurídico de la compañía.>> Más del Cesar: así vive alias Satanás en La Tramacúa, la cárcel de ValleduparPreocupación por extorsiones en el Cesar"Estuvimos contextualizando el tema (de las extorsiones y amenazas en Cesar) ante el ministro de Defensa, dando a conocer la presencia fuerte de las disidencias de las FARC, especialmente en el municipio de La Paz, en San Diego y Codazzi. Hemos hecho un consejo de seguridad. Esperamos que el ministro venga al departamento", acotó López.El secretario entregó, en entrevista con Noticias Caracol en vivo, un duro balance de la inseguridad en el Cesar. "La extorsión a comerciantes, a ganaderos, la presencia sistemática del Clan del Golfo, el Pacheca, la lucha por el territorio por el tema del microtráfico en el municipio de El Copey, en Bosconia, en El Paso, en Chiriguaná y Curumaní. Aquí estamos avanzando en lo que tiene que ver con la fuerza pública, pero esperando esa ayuda del Gobierno nacional en el incremento de la inteligencia en el departamento", concluyó el funcionario.Aunque la Policía brinda acompañamiento especial a Supergiros, la fuerza pública no da abasto para cubrir los cinco mil puntos de la empresa en el Cesar. Coljuegos lamenta asesinato de Marlen MozoPor medio de un comunicado, Coljuegos lamentó el homicidio de Mozo Jiménez en Bosconia. "Este crimen, que enluta a su familia, amigos y compañeros de trabajo, es un acto de violencia inaceptable que no debe tener cabida en nuestra sociedad", reflexionó. Así mismo, rechazó "las intimidaciones de los grupos armados y estructuras delincuenciales en contra de empresas del sector de juegos de suerte y azar como Supergiros, las cuales generan cuantiosos recursos para la salud y miles de empleos directos e indirectos en las regiones más apartadas de nuestro país". Finalmente, Coljuegos manifestó: "Este tráfico suceso nos recuerda la necesidad urgente de trabajar juntos, como sociedad, para erradicar la violencia y construir la anhelada paz total. Es imperativo que las autoridades competentes investiguen los hechos con celeridad y se judicialice a los responsables".>> Vea, también: cámara de seguridad expuso al asesino de un registrador en Cesar