El hecho que casi termina en tragedia comenzó cuando una mujer llamó a la Policía para denunciar que estaba siendo amenazada por su esposo y varios agentes se dirigieron a la casa. Sucedió en Sao Paulo, en Brasil .
Justo cuando los uniformados llegaron, se produjo una explosión causada porque el sujeto le roció gasolina al lugar y dejó las bombonas de gas abiertas.
Por fortuna, la mujer y sus hijos ya habían abandonado la casa cuando ocurrió la detonación, que dejó heridos a seis agentes.
El responsable fue detenido posteriormente.
Publicidad