Nuevos récords de muertos y contagios de COVID-19 preocupan a Europa, donde las nuevas variantes del virus, al parecer más contagiosas, no dan tregua.
Así lo dejó ver el primer ministro Boris Johnson, quien dijo: “la variante británica apunta a una mayor mortalidad”.
Sus declaraciones hicieron eco en los medios locales, como también lo ha hecho que Alemania haya superado las 50 mil muertes a causa de la enfermedad.
El presidente de ese país, Frank-Walter Steinmeier, honró con un acto simbólico a las víctimas fatales que deja el virus en su territorio.
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“Para muchas personas en nuestro país estas son semanas terriblemente oscuras. Demasiadas personas tienen que llorar por sus seres queridos. Muchas personas están luchando por sobrevivir en unidades de cuidados intensivos y hogares de ancianos”, señaló.
Además, el país ya registró su primer caso de la variante brasileña del nuevo coronavirus y tiene casos aislados de las mutaciones británica y sudafricana, lo que encendió las alarmas.
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Entretanto, el sistema Covax anunció acuerdo con la OMS para la adquisición y distribución de 150 millones de dosis de la vacuna contra del COVID-19 de Pfizer.
Y España informó un nuevo máximo de pacientes contagiados: más de 44 mil.
En Francia se anunció el requisito de la prueba PCR obligatoria a los viajeros de la Unión Europea, mientras que en Reino Unido evalúan la posibilidad de cerrar las fronteras para contener la expansión de la variante descubierta a en su territorio.