Vacuna que adelanta China pasa a segunda fase de prueba en humanos: ¿qué significa?

Aunque lograrla puede tardar entre 12 y 18 meses, en Wuhan, donde se originó el virus, continúan los ensayos clínicos.

En esta nueva fase de un ensayo clínico en humanos participan 500 voluntarios.

Es la primera vacuna recombinante candidata contra el COVID-19. Es decir, actúa como una infección natural, por lo que son especialmente buenas en enseñarle al sistema inmunológico cómo combatir los gérmenes.

La vacuna, desarrollada por el Instituto de Biotecnología de la Academia de Ciencias Médicas Militares china, está construida con métodos de ingeniería genética y busca prevenir enfermedades causadas por infecciones del COVID-19.

"Esta vacuna recombinante basada en vectores de adenovirus, que lleva el gen S del nuevo coronavirus, puede ayudar al cuerpo a producir una memoria inmunológica. La codificación del gen S es lo que hemos visto en la sección de la proteína. Entonces, la vacuna es para ayudar al cuerpo a producir una memoria inmunológica de esta proteína y el virus, y luego podemos impedir que entre", explica la investigadora Chen Wei.

La primera fase del ensayo clínico de la vacuna se centra en su seguridad, mientras que esta segunda fase evaluará su eficacia.

Según la Academia de Ciencias Médicas Militares de China, en esta segunda etapa se tiene una característica distintiva que es reducir el límite de edad, permitiendo que participen voluntarios mayores de 60 años. Para esta fase se reclutaron más personas, un poco más del doble que la primera.

Hasta el momento, cerca de 273 voluntarios han sido vacunados. Dentro de ellos, un residente de Wuhan de 84 años, que es el voluntario de mayor edad en lo que va de esta fase.