Selena Roth, de 25 años, fue hallada muerta a mediados de enero en un basurero de la base militar de Schofield, en Hawái, Estados Unidos. Ahora, casi un mes después de su asesinato, fue capturado su esposo Raúl Hernández Pérez como principal sospechoso del crimen.
La joven madre, que hablaba a diario con su mamá y hermana, dejó de contactarse con ellas, por lo que solicitaron a las directivas de la base que les informaran sobre su situación, lo que llevó a descubrir el cadáver de la soldado.
“Su asesinato fue tan horrible y brutal que ni siquiera pudimos ver su cuerpo”, reveló la hermana de Selena, Aubrey, a Wink News.
La soldado había iniciado su proceso de divorcio en octubre del año pasado y un mes después su esposo solicitó una orden de restricción porque supuestamente la joven había lanzado a la calle equipos electrónicos de él y desinflado las llantas de su vehículo.
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En una página que Aubrey creó para recaudar fondos que permitieran cubrir los gastos funerarios de su hermana, así como para su pequeña hija, la mujer dijo que la pequeña “nunca tendrá la oportunidad de conocer a su madre. Ella está dejando atrás a un padre y una madre que la adoraban, ningún padre debería tener que enterrar a su hijo”.
“Nuestro trabajo como su familia y amigos ahora es asegurarnos de que su hija la conozca y sepa cuán amable era su corazón, ¡y cuánto la amaba su madre!”, agregó.
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