Se casó con preso condenado por violación: “Él simplemente me completa”

Una mujer, llamada Gemma Morgan, de 31 años, contrajo matrimonio con un hombre condenado por violación a 20 años de cárcel en Estados Unidos. La boda tuvo lugar en el centro penitenciario el pasado 29 de diciembre.

• Juegan broma pesada a Gary Lineker, presentador de la BBC: gemidos en plena transmisión

La historia ha sido recogida por la prensa británica, en medio del asombro y escepticismo que genera la pareja.

“Todavía siento mariposas cada vez que llama o su nombre aparece en un mensaje. Siempre estoy muy emocionada”, declaró Gemma.

Su esposo es Leonel Vásquez, también de 31 años, quien se encuentra encarcelado desde 2011.

Todo inicio en el año 2020 cuando Gemma comenzó a recibir clases de español en línea, en su residencia en Glasgow, Escocia. Su profesora resultó ser la madre de Vásquez, quien terminó mencionando a su hijo en alguno de los encuentros.

Así fue como, poco a poco, Morgan y Leonel empezaron a comunicarse por correo y llamadas.

"El amor puede florecer sin importar quién seas. Él simplemente me completa", afirmó la mujer, quien en el pasado no contemplaba casarse.

Según Gemma su conexión fue inmediata: “Tenemos el mismo sentido del humor. A los dos nos encanta la música de los 90 y tenemos las mismas películas favoritas. No importa de qué hablemos".

Sobre el pasado de su esposo, la mujer manifestó: "Al principio pensé... 'Oh, sí, eso es algo muy serio por lo que fue condenado'”. Dijo que le pidió que le contara toda la historia. De acuerdo con ella, él era muy joven cuando pasó.

“Me sentí muy tranquila al hablar con él y también con toda su familia", señaló.

Luego de meses conversando, Gemma viajó a Estados Unidos en abril de 2022 para conocerse en persona. Su estadía fue de cinco semanas y consiguió verlo tres veces por semana.

• Escándalo en una comisaría: siete policías tuvieron relaciones íntimas y los sancionaron

Tras la visita, Leonel le propuso matrimonio por teléfono y así surgió el compromiso con miras a casarse en 2023, pero cuando Gemma fue a verlo a fin de año, él la sorprendió y la boda ocurrió el 29 de diciembre en la sala de visitas de la prisión de Virginia. No hubo testigos, solo dos guardias.

Según la mujer, las familias de ambos apoyan su unión. La pareja, actualmente, habla todos los días por teléfono aprovechando que Leonel tiene derecho a cinco llamadas de 20 minutos.

El hombre podría quedar en libertad en los próximos cuatro años por buen comportamiento.

“El amor no espera. Si te llaman para casarte con alguien, no tienes que esperar para un gran día, un gran vestido o un gran pastel”, exclamó Gemma.