Sacerdotes les robaron los celulares a sus víctimas para ocultar abusos sexuales

Dos sacerdotes en Italia fueron capturados por haber cometido violencia sexual contra dos hombres y luego orquestar un robo para quitarles los teléfonos celulares que contenían chats y videos incriminatorios, dijeron los fiscales.Los dos sacerdotes franciscanos estaban entre las seis personas arrestadas en el caso que comenzó en abril, cuando dos hombres en Afragola, una ciudad cerca de Nápoles, denunciaron un robo, informaron los fiscales en un comunicado.¿Cómo fue el robo?Los dos agresores, armados con palos y cuchillos, arrebataron el teléfono móvil a una de las víctimas y buscaron en vano el de la segunda antes de huir, según la Fiscalía.Las víctimas inmediatamente relacionaron el hecho con "relaciones anteriores con algunos frailes de la región de Campania y con abusos sexuales y violencias sufridas", afirma el comunicado.La investigación subsiguiente encontró "evidencia sustancial" de abusos sexuales "en varios monasterios, incluida la Basílica de San Antonio de Afragola"."De las escuchas telefónicas se desprende claramente que el robo se había cometido para sustraer a las dos víctimas los teléfonos en los que estaban almacenadas imágenes y chats embarazosos que podrían haber creado problemas a algunos frailes de los monasterios en los que las víctimas habían trabajado", escribieron los fiscales.Las víctimas también escribieron a los superiores de los sacerdotes para denunciar los ataques.Según la Fiscalía, los religiosos sometían a las víctimas a "relaciones sexuales" a cambio de ropa, comida o empleo.Las escuchas telefónicas demostraron que el párroco de Afragola, donde se encuentra la basílica, había ordenado el robo, "impulsado por el fuerte temor de afrontar las consecuencias de una denuncia presentada por las víctimas de violencia apoyada por chats, videos y mensajes", se lee en el comunicado.Según la Fiscalía, también fueron detenidas otras cuatro personas, calificadas como "conocidos" de ese sacerdote.Los medios de comunicación locales identificaron a una de las víctimas como italiana y a la otra como ciudadana no perteneciente a la UE. No se revelaron sus edades.