Rusia
ha enviado de forma encubierta al menos 300 millones de dólares a partidos políticos y candidatos extranjeros en más de dos docenas de países desde 2014 en un intento por ganar influencia, dijo el pasado martes, 13 de septiembre de 2022, una evaluación desclasificada de inteligencia estadounidense
.
La inteligencia estadounidense "evalúa que estas son cifras mínimas y que Rusia probablemente haya transferido fondos adicionales de forma encubierta en casos que no han sido detectados", dijo un alto funcionario de la administración.
"Creemos que esto es solo la punta del iceberg", dijo el funcionario a los periodistas bajo condición de anonimato.
En uno de los casos más atroces citados en la nueva evaluación, la inteligencia estadounidense dijo que el embajador ruso en un país asiático no identificado proporcionó millones de dólares a un candidato presidencial.
La evaluación desclasificada no dio detalles sobre países específicos. Pero una fuente de la administración familiarizada con los hallazgos alegó que Rusia gastó alrededor de US$500.000 para respaldar al Partido Democrático de centro-derecha de Albania en las elecciones de 2017 y también financió partidos o candidatos en Bosnia, Montenegro y Madagascar.
La fuente, que no estaba autorizada a hablar oficialmente, dijo que Rusia también ha utilizado Bruselas como un centro para fundaciones y otros frentes que respaldan a candidatos de extrema derecha, y que la embajada de Rusia en Ecuador recibió "grandes cantidades" de dinero desde 2014 a 2017, aparentemente con la misión de influir en las elecciones.
La evaluación dijo que Rusia ha utilizado contratos ficticios y compañías ficticias en Europa y ha canalizado más directamente fondos encubiertos en América Central, Asia, Medio Oriente y África del Norte.
'Asalto a la soberanía'
El funcionario dijo que Estados Unidos también estaba discutiendo la inteligencia más ampliamente con más de 100 naciones como parte de la "Cumbre de las Democracias" del presidente Joe Biden,
una iniciativa que prometió por primera vez en la campaña de 2020 en la que derrotó a Donald Trump, quien se ha negado a aceptar los resultados.
La administración Biden solicitó la evaluación luego de la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero, que provocó un gran esfuerzo de Estados Unidos para aislar a Moscú y armar a Kyiv.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo que la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones "también es un ataque a la soberanía".
"Es un esfuerzo por socavar la capacidad de las personas de todo el mundo para elegir los gobiernos que consideren más adecuados para representarlos", dijo a los periodistas.
La nueva evaluación no cubrió la política interna de Estados Unidos, pero la inteligencia del país norteamericano dijo anteriormente que Moscú intervino en las elecciones de 2016, en particular a través de la manipulación de las redes sociales, para apoyar a Trump, quien expresó su admiración por el presidente ruso, Vladimir Putin.
Cuando se le preguntó si el Gobierno de EE. UU. estaba preocupado antes de las elecciones legislativas de noviembre, Price dijo: "Cualquier intento de entrometerse en nuestro sistema democrático tendrá consecuencias fuertes y duras".
Una gestión, o declaración interna, del Departamento de Estado a las misiones estadounidenses en todo el mundo dijo que Rusia tenía una estrategia doble: impulsar las fortunas de los candidatos favorecidos, pero también ganar influencia dentro de los partidos políticos.
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