¿Realmente existió el Megalodón? Este sería el animal que acabó con su vida
El depredador marino fue uno de los animales más temidos en la historia debido a su tamaño y su gran mordida, que le permitía cazar grandes presas, como ballenas y otros animales marinos.
El megalodón vivió en una época posterior a la de los dinosaurios -
El megalodón
fue considerado el tiburón más grande de la historia, alcanzando longitudes de hasta 16 metros, el doble de largo que el tiburón blanco moderno. Muchos aspectos de su vida continúan siendo un misterio para los investigadores marinos, lo que para muchos plantea dudas de su existencia. ¿Realmente existió el megalodón, el más grande y temido depredador de los océanos? Esto dice National Geographic.
El Otodus megalodon, designado así por el equipo de investigadores de la revista, sí existió hace 23 millones de años aproximadamente en el Mioceno y se extinguió entre 2.5 y 4.5 millones de años atrás, en el Plioceno. Lo que significa que el megalodón vivió en una época posterior a la de los dinosaurios, en un periodo donde el clima y las condiciones geográficas eran diferentes a las actuales.
El megalodón es un animal extinto
A pesar de que el megalodón es conocido principalmente por los restos fósiles de sus dientes, estos no son abundantes. Como los tiburones actuales, el megalodón tenía un esqueleto cartilaginoso, lo que hace que los restos óseos no se conserven con facilidad. Los dientes, sin embargo, son relativamente comunes en los registros fósiles, aunque a menudo están aislados debido a que los tiburones mudan de dientes constantemente a lo largo de su vida.
Comparación del diente de un megalodón con el de un tiburón blanco -
Getty Images
El megalodón, al igual que los tiburones modernos, era un pez cartilaginoso. Sin embargo, su tamaño y su capacidad de mantener una temperatura corporal elevada, similar a la de los tiburones de la familia Lamnidae, como el tiburón blanco, le otorgaban ventajas en la caza. Esta habilidad para mantener su temperatura interna le permitía nadar más rápido y durante más tiempo, lo que era crucial para cazar grandes presas y recorrer grandes distancias en busca de comida.
Además, los estudios sobre los fósiles de megalodón han mostrado que estos tiburones crecían rápidamente en su juventud. Se estima que un megalodón alcanzaba más de dos metros de largo en su etapa juvenil y que crecía a un ritmo de más de 16 centímetros por año durante la primera mitad de su vida. Este crecimiento acelerado, combinado con su gran tamaño, lo convertía en un depredador.
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Su tamaño, junto con su gran fuerza de mordida, lo posicionaba como uno de los depredadores más letales de su tiempo. Se estima que la potencia de su mordida estaba entre 100.000 y 180.000 newtons, mucho mayor que la de los tiburones blancos actuales. Este tamaño le permitía cazar grandes presas, como ballenas y otros animales marinos.
¿Dónde vivió el megalodón antes de extinguirse?
Los fósiles de megalodón han sido encontrados en diferentes partes del mundo, como en las costas de América, África y Europa, lo que indica que estos tiburones tenían una distribución global. Durante el Mioceno, los continentes estaban dispuestos de manera diferente a como lo están hoy, lo que permitió a los megalodones habitar una gran variedad de ecosistemas marinos, como aguas tropicales y otras regiones cercanas a las costas.
Animación recreó cómo sería el ataque de un megalodón
En las imágenes se ve a un enorme megalodón, que se extinguió hace unos 3,6 millones de años, hacer añicos a una enorme fragata -
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Se descubrió que los megalodones preferían algunas áreas específicas para su reproducción. Estudios han señalado que las zonas de cría de estas especies eran limitadas, y algunos lugares identificados como sitios de reproducción incluyen la costa de Tarragona, en España, así como áreas cercanas a Florida y Panamá. Estos lugares proporcionaban las condiciones necesarias para que los jóvenes tiburones pudieran crecer sin ser amenazados por otros depredadores.
¿Por qué se extinguió el megalodón?
El megalodón prosperó en los océanos durante más de 20 millones de años, pero su desaparición aún plantea preguntas sin respuesta. Los fósiles más recientes de esta especie datan de hace unos 2.5 millones de años, pero no está claro si se extinguieron de manera gradual o por un evento catastrófico. Una teoría sugiere que las glaciaciones y el enfriamiento global de esa época pudieron haber afectado los hábitats cálidos que requerían estos tiburones de sangre caliente.
Este enfriamiento pudo haber reducido las áreas donde el megalodón podía vivir, lo que finalmente contribuyó a su desaparición. Otra posible causa de su extinción es la competencia con otros depredadores marinos. Es posible que tiburones como el gran tiburón blanco, que surgieron durante el mismo periodo, hayan desplazado al megalodón en algunas regiones, limitando sus recursos alimenticios y su capacidad para sobrevivir.
Lo que quiere decir que el animal que habría acabado con su vida es el tiburón blanco, pero la razón de su extinción sigue siendo un misterio. La falta de fósiles completos de su cuerpo dificulta la reconstrucción precisa de su anatomía y sus hábitos.