Un bebé de 6 meses estaba siendo comido por ratas que habían infestado la casa donde vivía con su familia, que también estaba habitada por otros tres menores de edad, una de las cuales es hermana de la víctima. Los hechos fueron denunciados en Indiana, Estados Unidos.
El padre, la madre y una tía fueron arrestados. Los dos primeros enfrentan cargos de negligencia hacia un dependiente por colocarle en una situación peligrosa, y la hermana de la progenitora -madre de dos de los niños- fue imputada por un delito adicional de cargos de negligencia por lesiones corporales graves.
Según reportó WEHT-TV, información que replicó el medio Univisión, el bebé dormía en una cuna que estaba a menos de un metro de la cama sus padres. David Schonabaum, su papá, llamó a emergencias tras encontrar a su hijo cubierto de sangre y con mordidas en los dedos.
De acuerdo con los reportes oficiales, el niño sufrió al menos 50 mordidas de ratas en la nariz, frente, mejilla y las peores las tenía en las manos, con algunos dedos prácticamente en el hueso, por lo que tuvieron que amputar varios de ellos.
El bebé de 6 meses también tenía lesiones en brazos, piernas y pies y estuvo en riesgo “mortal”, según las autoridades.
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Al ser preguntados sobre por qué permitieron que el niño sufriera este tipo de heridas, los padres dijeron que "no oyeron llorar al niño".
No era la primera vez que las ratas atacaban a los infantes en su casa, ya que los medios locales dijeron que dos niñas, hermana y prima del bebé mordido, les habían contado a sus profesores que habían sufrido lesiones mientras dormían y estas fueron causadas por los roedores, por lo que inició un proceso de inspección para evaluar las condiciones de vida de los menores de edad, que, al parecer, iba mejorando.
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Sin embargo, la Policía informó que al llegar al sitio para auxiliar al bebé mordido por ratas, encontró que este dormía en una habitación sucia, con restos de comida por todas partes y heces de roedor, cuyas huellas se veían en la sangre que quedó en la cuna y el suelo.
El padre manifestó que sabía, cuando se mudaron, que la casa estaba infestada de la plaga, por lo que puso trampas y veneno para acabarla, algo que obviamente no funcionó.
La madre y tía detenidas por negligencia fueron identificadas como Angel Schonabaum y Delania Thurmon.
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