La Policía tomó una "decisión errónea" al no entrar antes en la escuela de Uvalde, donde Salvador Ramos mató a 19 niños y dos maestras,
dijo el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steven McCraw.
"Desde el beneficio de la retrospectiva... fue una decisión errónea y punto", expresó McCraw en una conferencia de prensa. "Por lo que sabemos, creemos que se debería haber entrado lo antes posible", enfatizó.
La Policía de esta ciudad de Texas ha sido objeto de críticas por haber tardado una hora en neutralizar al pistolero, quien estaba atrincherado en un aula de la escuela primaria Robb.
En una intensa sesión informativa en Uvalde, McCraw trató de explicar una vez más la secuencia de los acontecimientos.
¿Qué pasó antes y durante la masacre en la escuela de Uvalde?
Tras dispararle a su abuela en la cara en su casa, Salvador Ramos
se subió a un vehículo y condujo hasta las cercanías de la escuela primaria, donde se estrelló alrededor de las 11:28 de la mañana.
Desde allí caminó con un rifle y munición durante 12 minutos hasta que entró en la escuela, sobre las 11:40 hora local. Cuatro minutos más tarde, la Policía irrumpió en el colegio.
En su recorrido a pie hasta el centro escolar, Salvador Ramos disparó contra dos personas que se encontraban en una funeraria en la calle de enfrente, sin causarles heridas.
El director regional para el Sur de Texas del Departamento de Seguridad Pública estatal, Víctor Escalón, aseveró que, al contrario de lo que indicaron fuentes del distrito escolar, no hubo un enfrentamiento entre un guardia de seguridad y el atacante cuando este entró a la escuela primaria Robb.
"No es verdad. Entró a la escuela sin oposición", subrayó.
El funcionario estatal reconoció además que, "aparentemente", el cerrojo de una de las puertas de la escuela se habría encontrado abierto cuando Salvador Ramos llegó al centro, por razones que todavía se investigan.
McCraw dijo que el comandante en el lugar de los hechos creía que, en ese momento, el sospechoso, Salvador Ramos, estaba atrincherado solo en el aula y que no había supervivientes entre los alumnos.
Esos agentes pidieron refuerzos e iniciaron la evacuación de estudiantes y profesorado del resto del colegio, mientras el joven seguía atrincherado en un aula donde disparó indiscriminadamente.
McCraw contó que “una niña llamó de nuevo. Se le dijo que se quedara en la línea en silencio. Ella dijo que el agresor había cerrado la puerta y entre las 12:43 y las 12:47 llamó diciendo: 'por favor, envíen a la policía ahora'”.
Fue aproximadamente hacia esa hora que llegaron los agentes especiales de la Patrulla Fronteriza, que lograron abatir al tirador.
"No estoy defendiendo nada, pero si nos remontamos a la línea de tiempo, hubo cientos de disparos en cuatro minutos en esas dos aulas", aseguró McCraw.
"Los disparos posteriores fueron esporádicos y se produjeron en la puerta. Así que creyeron que ya no había nadie vivo y que el sujeto estaba intentando mantener a raya a las fuerzas del orden", añadió.
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