Kyle Rittenhouse es un joven acusado de causar la muerte a dos personas y herir a otra durante las protestas ‘Lives Black Matter’ en agosto de 2020 en Estados Unidos . Tres meses después quedó en libertad tras pagar una fianza de dos millones de dólares que consiguió, entre otros, gracias a campañas de donaciones en línea.
Una de esas cruzadas para conseguir gastos de representación fue realizada a través de la página cristiana GiveSendGo. Un grupo de activistas publicó la identidad de los donantes anónimos y fue cuando se descubrió que el teniente William Kelly había dejado 25 dólares como contribución.
Al revisar minuciosamente se evidenció un mensaje que le costó el puesto en la división de asuntos internos de la Policía: “Que Dios te bendiga. Gracias por tu valor. Mantén la cabeza alta. No has hecho nada malo".
Las autoridades concluyeron que “las acciones del teniente violan las políticas de la ciudad y del departamento. Sus atroces comentarios erosionan la confianza entre el Departamento de Policía de Norfolk y aquellos a los que han jurado servir”. Por eso, tomaron la decisión de despedirlo, pues evidentemente tomó parte en un proceso que incluye la muerte de dos personas.
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