Un policía en Ecuador fue capturado por presuntamente haber ordenado el homicidio de su bebé a dos sicarios a los que, además, les dio su arma para que cometieran el crimen. Los delincuentes fueron aprehendidos poco después gracias a una foto que tomó un vecino de la mamá de la víctima, que les permitió a las autoridades identificarlos plenamente.
La mamá de la niña asesinada declaró que su expareja la llamó y le pidió salir de la casa para hablar. En ese momento llegaron los asesinos en una moto y dispararon contra la menor, según informó el medio Ecuavisa.
Los sicarios “reconocieron su participación en el acto ilícito tras haber sido contratados por el uniformado", decía el informe de la Fiscalía.
El policía y los dos autores materiales del homicidio podrían pagar una condena de 22 a 26 años de prisión.
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