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A una verdadera tragedia tratan de sobrevivir tres hermanos de 11 y 13 años de edad luego de que su papá, quien era soltero, muriera por COVID-19 y los contagiara con la enfermedad.
Ellos son Moisés y sus hermanos gemelos Antonio y Sydney, que viven en California, bajo el cuidado de una tía que los arropó después de que su padre Abraham Amezcua fuera hallado sin vida en su casa.
“El jueves 10 de diciembre, Abraham Amezcua, falleció trágicamente en su casa, encontrado fallecido por su hijo mayor, Moisés. Luchaba contra el COVID-19 en casa y no pasó la noche”, describió un primo de los pequeños Amezcua en una iniciativa en GoFundMe que busca recursos para su sostenimiento.
Abraham, que trabajaba como estibador en el puerto de Los Ángeles, vivía con problemas económicos, pero luchó hasta el último momento por sacar adelante a sus hijos.
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Según algunos medios locales, Abraham debía seis meses de la hipoteca de su hogar y se atrasó en el pago de la electricidad y el agua, servicios que podrían ser suspendidos si no son pagados.
“La compañía de agua y electricidad ha notificado que cortarán el agua y la electricidad en una semana, el 23 de diciembre, si no se realizan todos los pagos atrasados. La familia tiene una gran necesidad de apoyo financiero en este momento. Los niños tienen la suerte de tener una tía que los ama y que los cuidará, pero ella también está desempleada y bajo presión financiera”, dijo el familiar de los niños en GoFundMe.
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“Estos niños están devastados por la pérdida de su amado padre y las maravillas de la Navidad quedarán manchadas para siempre en sus corazones. Estos son niños preciosos que no pueden valerse por sí mismos”, añadió.
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