Cuando José Altamiro Gomes se enteró de que su esposa tenía todo listo para divorciarse tomó una dolorosa decisión: asesinar a la hija de la mujer y así causarle un dolor irreparable.
El sujeto de 56 años, según el medio G1 Globo , ubicó a la joven de 16 años, identificada como Maria Eduarda Hoffman, y le causó la muerte con arma cortopunzante.
Aunque no era su padre biológico, compartió con ella por muchos años y ella incluso lo consideraba como tal y lo llamaba “papá”. En todo caso, ganó la maldad.
Como si se tratara de un castigo terrenal que la vida le tenía preparado, José Altamiro Gomes sufrió un accidente cuando se movilizaba en una moto. Chocó de frente con un autobús y falleció en el acto en una vía de Brasil , donde ocurrieron los hechos.
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"Fue una hija increíble. Nunca tuve que ir a ninguna escuela por ella, tenía las mejores calificaciones que podía tener una estudiante”, lamentó la madre, quien no solo sufrió la pérdida de su hija, sino que padeció la traición de la persona con quien compartió tanto tiempo.
Autoridades informaron que, previo a asesinar a la adolescente, el hombre le había manifestado a su compañera sentimental la intención de arrebatarle “el bien más preciado que tenía en su vida” tras conocer la intención de divorcio.
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