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El rostro de angustia de muchas personas mayores que huyen de la guerra Ucrania-Rusia refleja el sentimiento de dejar todo atrás, mientras que en silla de ruedas, caminadores, y hasta con bastones recorren kilómetros y kilómetros tratando de huir.
"Es realmente difícil porque vivimos allí muchos años y a mis nietos los han sacado de la escuela", dice Vera Verozub, una de las mujeres que huye del conflicto.
El peor drama lo están viviendo los evacuados de Mariupol, la ciudad que ha llevado los más duros ataques. No tienen servicios públicos y los niños han sido llevados a improvisadas carpas para resguardarlos de la guerra.
Los techos están rotos en muchos lugares. Hay muchos muertos tirados en los patios. La gente se congela y tiene hambre
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Con lágrimas en los ojos relatan la tragedia que alcanzaron a presenciar mientras huían: “Hubo cuerpos tirados cerca de una de las tiendas (en Mariupol) durante tres días. Mujer y hombre. Los lugareños los cubrieron con alfombras y simplemente están acostados allí".
Para quienes se han logrado salvar es inconcebible que los ancianos y los niños estén viviendo esta tragedia.
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"Ellos, los rusos, son escoria. Puedo entender bombardear aeródromos y (edificios) de comunicación del Gobierno, pero ¿qué tenemos que ver nosotros con esto? Aquí casi todo el mundo habla ruso, ¿por qué nos bombardean?", señaló Liliana Sidorska, otra mujer que trata de escapar.
Este miércoles habrá una nueva jornada de corredores humanitarios desde seis lugares de Ucrania.
"Perdimos nuestra vida, nuestra seguridad, no podemos hacer ningún plan porque no sabemos qué pasará mañana. Es muy estresante ahora, es lo único que puedo decir", denuncia la ciudadana Anastasia Kazankina.
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