Una historia a la que parecen acostumbrados los habitantes de un pequeño poblado llamado Gea, en Israel, tiene sorprendido al mundo .
Se trata de la entrañable amistad de una niña de 8 años con una pitón de un tamaño de más de 3 metros.
La niña y el animal juegan mientras se bañan juntos en una piscina inflable, en la que esta última ni siquiera cabe. Parecen inseparables.
La mamá de la niña aseguró que Belle, como llaman a la pitón, creció junto a su hija, lo que les permitió a las dos sellar un vínculo especial.
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