Una mujer terminó en la cárcel cuando la Policía descubrió lo que llevaba en un costal que arrastraba por una calle de Neza, en México: un cadáver.
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Según las autoridades, horas antes la señalada homicida se encontraba bebiendo con su víctima dentro de una casa y fue ahí cuando ella lo asfixió y “después intentó mutilar el cuerpo, por lo que habría cortado diversas partes”.
Además de homicidio, la mujer enfrenta el cargo contra el respeto a los muertos y violación a las leyes de inhumación y exhumación, ya que pretendía deshacerse del cuerpo de la víctima.
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La Fiscalía instó a los ciudadanos a que denuncien a la mujer si la reconocen como “probable partícipe de algún otro ilícito”.