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Las auroras boreales, también llamadas luces del norte, son fenómenos que ocurren cuando partículas cargadas del sol interactúan con el campo magnético de la Tierra. Estas partículas generan luces que se desplazan en el cielo. Aunque este fenómeno ocurre cerca de los polos, hay varios lugares donde se puede observar.
Las auroras se pueden ver durante todo el año, pero las mejores oportunidades para observarlas ocurren entre marzo y septiembre, según aplicaciones de predicción como el Centro de Predicción Meteorológica Espacial de la NOAA, Aurora Alerts y My Aurora Forecast & Alerts. Durante estos meses, las noches son largas y las condiciones meteorológicas suelen ser más favorables para la observación.
Las zonas cercanas al Ártico ofrecen cielos oscuros, lo que aumenta las probabilidades de ver el fenómeno. Sin embargo, la visibilidad de las auroras depende de factores como la actividad solar, el clima y la ubicación geográfica. Según el portal de National Geographic, Magnus Wik, científico del Instituto Sueco de Física Espacial, menciona este aspecto.
Es considerada la capital de las auroras boreales. Esta ciudad se encuentra en una de las mejores latitudes para observar el fenómeno, entre 69 grados de latitud norte, lo que la convierte en un lugar ideal para ver las luces del norte durante los meses de invierno. Además de ser un excelente punto de partida, Tromsø ofrece diversas actividades turísticas relacionadas con las auroras, como safaris en motonieve, pesca en hielo y excursiones en trineos tirados por perros.
Durante los meses de octubre a marzo, la ciudad experimenta largas noches oscuras, lo que aumenta las oportunidades de ver las auroras. Sin embargo, los visitantes también deben estar atentos a las previsiones del clima y la actividad solar, ya que las condiciones deben ser las adecuadas para disfrutar del fenómeno en su máxima expresión.
Es un pequeño pueblo en el norte de Suecia, conocido por su ubicación privilegiada para observar auroras boreales. Su proximidad al Parque Nacional Abisko y su clima relativamente seco hacen que este lugar sea uno de los mejores destinos del mundo para presenciar el fenómeno. La estación meteorológica cercana, que se encuentra en una zona de baja contaminación lumínica, ofrece un entorno perfecto para la visualización de las luces del norte.
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Uno de los aspectos más destacados de Abisko es el famoso ‘Sky Station’, un centro de observación situado en lo alto de una montaña que proporciona vistas espectaculares del cielo. Los visitantes pueden acceder a él mediante un teleférico, lo que les permite disfrutar del espectáculo en condiciones óptimas, lejos de las luces artificiales de la ciudad. La temporada de auroras en Abisko es desde mediados de noviembre hasta marzo, lo que lo convierte en un destino popular durante el invierno.
Islandia es otro de los destinos más reconocidos para ver auroras boreales. Aunque Reikiavik, la capital del país, está ubicada en una zona de mayor actividad urbana, se pueden ver las auroras en sus alrededores sin necesidad de desplazarse demasiado lejos. El sur de Islandia es particularmente atractivo para los viajeros que desean observar este fenómeno natural, ya que el clima es favorable durante los meses de invierno y el paisaje volcánico crea un entorno espectacular para la visualización de las luces del norte.
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Uno de los lugares más populares para observar las auroras en Islandia es el Lago Thingvallavatn, que se encuentra en el Parque Nacional Thingvellir, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Desde este lugar, es posible disfrutar de una vista panorámica del cielo iluminado por las auroras boreales, mientras se contempla un paisaje único de glaciares y campos de lava. La mejor temporada para visitarlo es entre septiembre y abril.
Ubicada en la región de Laponia, Rovaniemi es conocida por ser la ‘casa oficial’ de Santa Claus, pero también es un excelente destino para ver auroras boreales. Rovaniemi se encuentra justo por encima del Círculo Polar Ártico, lo que lo convierte en un lugar privilegiado para este tipo de observación. Durante los meses de invierno, los cielos oscuros y las bajas temperaturas crean las condiciones ideales para ver las luces danzantes del norte.
En Rovaniemi, los turistas pueden optar por alojarse en un 'hotel de hielo', donde podrán disfrutar de una experiencia única mientras esperan las auroras. Además, la región ofrece una amplia gama de actividades de invierno, como paseos en motonieve, safaris en trineo de huskies y visitas al Santuario de Renos de Laponia, que complementan la experiencia.
Es otro de los destinos más populares para ver las auroras boreales en América del Norte. Esta ciudad, situada por debajo del círculo polar ártico, ofrece una temporada de auroras extendida, desde finales de agosto hasta abril, lo que permite a los turistas tener muchas oportunidades de ver el fenómeno. Fairbanks cuenta con una de las tasas más altas de avistamientos de auroras en el mundo, gracias a su ubicación geográfica y su clima relativamente seco.
Para aquellos que buscan una experiencia más inmersiva, Fairbanks ofrece excursiones en trineo y tours por la tundra. Además, en la ciudad se encuentran varias instalaciones y centros especializados que brindan información y pronósticos sobre la actividad solar, lo que ayuda a los turistas a elegir el mejor momento para ver las auroras.
DANNA SOFÍA SUÁREZ GALEANO
NOTICIAS CARACOL
dssuarez@caracoltv.com.co
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