No bastaron las imágenes dearmas publicadas por Salvador Ramos, de 18 años, en sus redes sociales para contener una nueva tragedia por violencia armada en Estados Unidos. El blanco, otra institución educativa: la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas.
Según las autoridades, actuó solo. Antes de abrir fuego en el centro educativo, Ramos le disparó a su abuela, con quien vivía y quien está delicada en un hospital. Luego se estrelló en el carro que conducía cerca a la escuela.
“Durante la noche, obviamente, el enfoque principal fue tratar de identificar a las víctimas, notificar a las familias. Hemos podido sacar a todas las víctimas de la escuela, todas las familias han sido notificadas, pero en este momento estamos tratando de procesar la escena con las autoridades de Texas, la Policía federal, todos trabajando juntos para reunir todas las pruebas, buscar cámaras de vigilancia aquí en la escuela”, indicó Chris Olivarez, del departamento de seguridad pública de Texas.
Ramos se atrincheró en un salón de clases y allí disparó, por lo que todas las víctimas son de la misma clase. Hasta allí llegaron los primeros policías que atendieron la emergencia.
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“Algunos de nuestros muchachos se han visto afectados de manera bastante significativa, especialmente aquellos que respondieron en la escena, los primeros en llegar a la escena, para ver esas imágenes, ir a esa escuela y luego ver a esos niños tirados allí, impotentes”, dijo Olivarez.
Ramos era ciudadano estadounidense y estudiante de la preparatoria de Uvalde, ciudad en la que cometió la masacre. Apareció con chaleco antibalas, pero este no le sirvió para esquivar los disparos de las autoridades.
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A pocos días de las vacaciones escolares de mitad de año, la tragedia sacudió a la escuela primaria Robb de la que Ramos era exalumno.
Todavía se sabe poco sobre él y las autoridades intentan encontrar el motivo de su ataque. Las pistas, las que se reiteran una y otra vez en la prensa de EE. UU., se centran en la foto de las armas publicada en sus redes sociales cuatro días antes de la matanza. Dichas armas las adquirió de forma legal tras cumplir los 18 años el pasado 16 de mayo. Hasta ahora se desconoce si usó las mismas que publicó en internet.
Según datos recogidos por la prensa estadounidense, Ramos sufrió acoso escolar cuando era niño porque tenía dificultades para hablar y por la situación económica de su familia.
La escuela Robb tiene en su mayoría estudiantes hispanos de familias de recursos económicos limitados.
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De acuerdo con personas cercanas a Ramos, entrevistadas por el Washington Post, el joven había tenido reacciones violentas en los últimos años.
Su abuelo, con quien también vivía tras pelearse con su madre, aseguró que ese día no vio nada inusual que augurará lo que ocurriría, solo que peleó con su abuela por una factura del teléfono.