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Hay tristeza en Fort Hall, localidad de Idaho (EE. UU.) por el ataque de una jauría de perros que dejó un niño muerto y una mujer gravemente herida. Las víctimas son madre e hijo, informó la prensa estadounidense.
De acuerdo con el reporte, los hechos ocurrieron el pasado sábado cuando el pequeño de 7 años salió a jugar y su madre lo encontró sometido por los animales. Ella intervino para tratar de salvarlo, pero fue en vano.
Cuando llegó la Policía hallaron al niño y su madre, Emily Islas, gravemente heridos por lo que fueron trasladados a un hospital; sin embargo, el pequeño falleció por sus graves lesiones. “Su madre continúa en cuidados intensivos con daños al sistema nervioso y una arteria rota”, indicó People.
“Esta es una trágica situación para la familia y mi corazón está con ellos. Perder a un hijo es la peor pesadilla para un padre. Esta situación es muy difícil de entender”, manifestó Torey Danner al diario Idaho State Journal.
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El ataque de la jauría de perros ocurrió dentro de la reserva india de las tribus Shosone-Bannock, donde vivían madre e hijo en una casa móvil, ubicada en la propiedad de los dueños de los perros.
People agregó que los animales, dos rottweilers y otros dos de raza mixta, fueron sacrificaros, mientras que los propietarios “recibieron 15 multas por diferentes violaciones, incluyendo por rebasar el límite de mascotas o animales permitidos dentro de la reserva”.
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Los allegados a Emily Islas están recaudando fondos para ella y su tratamiento a través de Gofundme.
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