Un hombre en Estados Unidos , tiene suerte de seguir respirando después de tragarse accidentalmente un audífono inalámbrico.
Bradford Gauthier se despertó el pasado martes con dificultades para tragar, lo que atribuyó a un simple dolor de garganta y continuó su día como si nada, lo que no sabía es que en su cuerpo tenía alojado uno de sus airpods.
Empezó a sentir que algo estaba mal cuando, después de tomarse un vaso de agua, se percató de que el líquido bajaba de una manera irregular.
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“Volví a salir por la mañana y recogí nieve durante una hora. Cuando entré, traté de beber un vaso de agua de nuevo y no pude”, dijo Gauthier para el medio local 22 News WWLP.
En broma le mencionó a sus esposa que quizá se había tragado un auricular, pero fueuno de sus hijos que le hizo caer en cuenta que uno de los dispositivos hacía falta.
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Gauthier se tomó una radiografía en una sala de emergencias y fue cuando se enteró de que sus sospechas eran ciertas: en su cuerpo tenía alojado un audífono de casi dos centímetros.
El médico gastrointestinal que lo atendió estaba sorprendido de que el bloqueo no le resultara raro o incómodo.
Fue necesaria una endoscopia para retirar el auricular. Después del procedimiento médico, Gauthier se fue a su casa a ponerse al día con su trabajo.
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