Hombre fue capturado tras arrojar a pitbull desde edificio, pero quedó en libertad bajo supervisión

Kith, un perro pitbull de 2 años que vivía en la ciudad de Nueva York, tuvo un final trágico tras ser arrojado desde el balcón del piso 14 de un edificio. El sujeto, quien fue detenido por las autoridades, habría sido dejado en libertad.

El pasado 18 de noviembre de 2024, el Departamento de Policía de Nueva York informó sobre un caso de abuso animal en el cual un sujeto tiró al vacío a un perro de raza pitbull en una edificación de Brooklyn, Nueva York.

"Los detectives iniciaron una investigación de inmediato. Después de realizar una investigación rápida, pudieron armar un caso y arrestar al sospechoso, lo que le permitió enfrentar la justicia por su acto atroz", destacaron las autoridades en su cuenta de X, antes Twitter.

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¿Por qué tiró al pitbull desde un balcón?

De acuerdo con el Luis Gabriel Santamaría, dueño de la mascota, el 1º. de noviembre llegó a su casa y encontró a su adorado pitbull, el cual tuvo desde que era un cachorro, tirado muerto en la acera.

Según el testimonio del hombre de 27 años, el cual fue compartido por el New York Post, un hombre al que había conocido recientemente irrumpió cerca de las 5:00 a.m. a su apartamento y, después de una pelea, arrojó al pitbull desde lo alto del edificio de apartamentos.

"Era literalmente mi mejor amigo. Nunca hubiera pensado que haría lo que hizo, asesinar a mi perro sin ningún motivo", comentó desconsolado el dueño.

New York Post

¿Una fatal obsesión?

Alberto Morris, de 33 años, fue arrestado el lunes de 18 de noviembre tras ser acusado con cargos de crueldad agravada, hurto mayor, posesión criminal de propiedad robada, daños criminales y tortura de un animal, esto tras ser señalado de lanzar a un pitbull desde el piso 14 de un edificio.

Aunque el informativo neoyorquino señaló que Morris, quien llegó a Estados Unidos hace un año, no tenía antecedentes.

El dueño de la mascota asesinada dijo que conoció al que señala como ejecutor de su mascota semanas antes del crimen. Admitió que, gracias a que ambos tienen herencia panameña y a que vivían cerca, crearon vínculos y construyeron una amistad.

Pero las cosas escalaron muy rápido, y Santamaría dijo que Morris se volvió obsesivo, mandándole mensajes extraños y apareciéndose en su casa de la nada para tocarle el timbre durante horas.

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Horas antes de la muerte del pitbull, ambos habían ido a una fiesta de Halloween, donde el investigado se emborrachó y tomó una actitud agresiva. Según el afectado, en medio de una disputa, Alberto Morris tomó las llaves de su apartamento.

En su relato dice que corrió hasta su vivienda en compañía de sus amigos para evitar que el sujeto hiciera estragos en ella, puesto que al llegar vieron que, al parecer, el inmigrante tomó a la mascota y la asesinó. Además de ello, habría intentado arrancar una cámara de seguridad del país antes de escapar del lugar.

Pese a los hechos, el presunto atacante fue dejado en libertad bajo supervisión hasta su próxima cita judicial.

“Tengo mucha curiosidad por saber por qué es un hombre libre después de lo que hizo. No creo que ningún asesino deba ser dejado en ningún lugar fuera de la cárcel”, dijo el dueño, citado por el NY Post, quien admitió que el violento hecho tiene a su familia en estado de shock.

A las afueras de la vivienda, los cercanos a la mascota marcaron el pavimento con un corazón en su honor.

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New York Post