En Phoenix, capital del estado de Arizona (Estados Unidos), se presentó un insólito momento cuando un ciudadano escaló sin protección algunaun edificio de 40 metros para llamar la atención de la ciudadanía y así recolectar fondos para causas provida.
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Todo ocurrió en horas de la mañana del pasado 7 de febrero. El hecho fue transmitido en vivo por el hombre, de 22 años, identificado como Nelson DesChamps.
La escalada duró aproximadamente una hora y cuando el sujeto llegó a una parte alta del edificio de 40 metros, fue detenido por las autoridades.
“Este no es el lugar ni el momento para hacer esto. Es extremadamente peligroso”, dijo un portavoz de las autoridades a los medios de comunicación .
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Actualmente se desconoce a qué cargos se enfrenta el hombre que escaló el edificio de 40 metros.
Esta no sería la primera vez que el ciudadano recurre a esta medida, pues en ocasiones anteriores escaló el Hotel Aria en Las Vegas para protestar en contra de las restricciones del COVID-19. Asimismo, en el año 2022 trepó el Salesforce de San Francisco, colgando pancartas en el lugar.
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Niño de tres años caminó por la cornisa de un segundo piso
Un niño de tres años caminó por la cornisa de un segundo piso y generó preocupación entre la comunidad de un vecindario ubicado en la ciudad argentina de Córdoba.
El hecho quedó registrado en video y en este se evidencia cómo el menor de edad caminó por el espacio de la ventana de su residencia, poniendo su vida en grave peligro.
Dos policías llegaron al lugar y con la ayuda de un arriesgado ciudadano lograron salvar al pequeño de un destino trágico. El hombre, impulsado por los uniformados, escaló hasta la planta alta del domicilio y tomó al bebé en brazos, evitando que este cayera.
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Luego de investigar la situación y constatar lo ocurrido con los familiares del niño de tres años, las autoridades conocieron que el infante estaba a cargo de su padre. Sin embargo, debido al cansancio, este se quedó dormido y fue cuando se suscitó el episodio, según revelaron medios de comunicación argentinos.
“Mi hija trabaja muy temprano, el marido la lleva a las 5 y media. Yo me cruzo a cuidarlo hasta que él vuelve, son 15 minutos. El papá se durmió, él trabaja a la tarde y mi hija sale a las 12. El niño se despertó, juntó un mueble y, como duermen con las ventanas abiertas por el calor, se trepó”, señaló la abuela del niño de tres años al medio Cadena 3.
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