Foto @Jaskripcbs4
A las 11:00 a.m. se llevó a cabo la audiencia de fianza del jugador colombiano Pablo Armero, quien se presentó junto a otros presos, encadenado y en uniforme color naranja, al circuito judicial número 11 de la ciudad de Miami.
Allí, la jueza le fijó la fianza, le puso algunas restricciones y lo volvió a convocar para finales de junio a una nueva audiencia.
Pablo armero se encontraba de vacaciones en la ciudad de Florida, con su esposa, Maríaa Elena Bazán, y sus dos hijos. Los cuatro estaban hospedados en el Metropolitan Hotel de Miami Beach; incluso, el jugador publicó, desde el sábado, algunas fotos dentro del hotel y con su esposa en una discoteca.
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La pareja parecía confirmar el buen momento por el que estaba pasando, tanto, que sólo 7 meses atrás ambos publicaron un video desmintiendo rumores de una supuesta separación.
"Aquí es paz y alegría, así que no inventen. Paz y amor, Dios por delante, no digan mentiras que aquí está todo bien", decía el lateral del Udinese en ese momento.
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Sin embargo, las vacaciones se vieron truncadas por un incidente que hoy tiene al jugador como protagonista de importantes medios de comunicación alrededor del mundo.
El pasado martes, en horas de la mañana, la Policía de Miami Beach llegó al hotel donde se encontraba hospedado el jugador, debido a las llamadas de los huéspedes que oían gritos en su habitación.
Según testigos, cuando la Policía ingresó al lugar, encontraron a Armero y a su esposa en estado de embriaguez y en medio de una fuerte discusión, además hallaron unos mechones de pelo en el piso.
La esposa del deportista dijo que éste le había arrancado el pelo y que se había tornado violento.
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A las 9:24 a.m. fue arrestado y conducido a la TGK Correctional Center de Miami, en donde pasó la noche. El cargo, según el expediente, es violencia doméstica.
"Es muy serio el cargo de violencia doméstica en la Florida, lleva hasta un año de prisión", explica el abogado de familia Albert Quirantes.
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Este miércoles el jugador asistió a la audiencia de fianza, en la que la jueza Victoria Del Pino le explicó que debía pagar 1.500 dólares para salir en libertad y que se le asignaba un juez de oficio para que en el transcurso del día pudiera salir. También se le impusieron algunas restricciones.
"El juez va a presentar una orden judicial que dice que usted no puede tener contacto con María Elena Bazán... ¿entendido?”, le dijo la juez Del Pino.
La orden de alejamiento impuesta a Armero estará vigente hasta una nueva audiencia y, sin importar el lugar del mundo en el que se encuentre, el jugador no podrá tener ningún contacto con su esposa.
"Si esa persona o la víctima alegada se comunica con usted o usted tiene comunicación con ellos o responde a mensajes de texto, favor entienda que va a estar en quebrantamiento de la orden de alejamiento”, le señaló la juez.
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También le indicó a Pablo Armero que deberá volver a audiencia dentro de 21 días hábiles, tiempo en el cual se estudiará su caso y podría tomarse una decisión.
Se espera que Armero salga en horas de la tarde de la cárcel y aunque el jugador podrá dejar el país, deberá cumplir con lo impuesto por la jueza y asistir a la audiencia, que según los tiempos, sería para el 29 de junio.
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