Si bien Estados Unidos reiteró su preocupación por altos los niveles de producción de cocaína en Colombia, el subsecretario para el hemisferio occidental de EE. UU., Brian Nichols, destacó que el problema para su país ya no es esta droga, la guerra ahora es contra el fentanilo.
“De hecho, el consumo de la cocaína en los Estados Unidos está a la baja, no es el problema acá, tal vez en otros países en la región, en Europa, África, sí es un problema grave; en Estados Unidos el fentanilo es nuestro problema, es nuestro flagelo en este momento”, aseguró el funcionario.
Y es que, según las cifras oficiales, durante el 2022, de las 107.081 muertes por sobredosis el 68% corresponde a opioides, alrededor de 73 mil relacionadas con el fentanilo, mientras que los fallecimientos que involucran cocaína con otras sustancias son 24.486.
No obstante, Nichols no deja de expresar los reparos de la administración Biden por las 230 mil hectáreas de hoja de coca sembradas y las 1.738 toneladas de cocaína producidas en Colombia, según el más reciente reporte de Naciones Unidas, cifras que afirma pueden calificarse como una explosión.
“Claro que sí, pero también tenemos que recordar que eso no viene de la nada. Durante el periodo de COVID no había erradicación, también con el proceso de paz total hay una pausa en ese proceso, entonces hay que buscar las maneras de solucionar el tema y nosotros estamos aquí para colaborar con el gobierno colombiano para eso”.
Muertes por fentanilo en EE. UU.
La proporción de muertes por sobredosis de fentanilo combinado con estimulantes en Estados Unidos aumentó más de 50 veces entre 2010 y 2021 al pasar de 0,6 % al 32,3 % de los fallecimientos, indica una investigación publicada este jueves 14 de septiembre en la revista Addiction.
Los fallecimientos por esta mezcla durante la llamada "cuarta ola" de la crisis por sobredosis de opioides saltaron en ese periodo de 235 a 34.429, señaló el estudio encabezado por la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA).
"Vemos que el uso de fentanilo con estimulantes está convirtiéndose rápidamente en la fuerza dominante de la crisis de sobredosis en Estados Unidos", dijo Joseph Friedman, autor principal del estudio e investigador en la Escuela David Geffen de Medicina en UCLA, en un comunicado de la universidad.
Explicó que el fentanilo "ha inaugurado una crisis por sobredosis de polisustancias, lo que significa que la gente mezcla fentanilo con otras drogas, como los estimulantes, pero también otras incontables sustancias sintéticas".
"Esto presenta muchos riesgos para la salud y nuevos retos para el personal sanitario. Tenemos datos y experiencia médica para el tratamiento de trastornos por uso de opioides, pero comparativamente poca experiencia con la combinación de opioides y estimulantes, u opioides mezclados con otras drogas", expuso.
Para el investigador, "esto hace que sea difícil estabilizar médicamente a las personas que están alejándose del uso de polisustancias".
El análisis subraya cómo una primera ola en la crisis de opioides en Estados Unidos comenzó con un incremento en las muertes por opioides bajo receta a comienzos de la década de 2000, y una segunda ola con la heroína en 2010.
Alrededor de 2013 un aumento en las sobredosis de fentanilo marcó la tercera ola, mientras la cuarta (sobredosis de fentanilo con estimulantes) comenzó en 2015 y sigue creciendo.
Para 2021, los estimulantes como la cocaína y las metanfetaminas se han convertido en la clase más común de drogas halladas en sobredosis en las que el fentanilo está involucrado en cada estado de EE. UU.
"Este aumento en las muertes por fentanilo y estimulantes constituye la 'cuarta ola' en la prolongada crisis de sobredosis de opioides en Estados Unidos, cuyo saldo mortal sigue elevándose de forma precipitada", indicó la UCLA.
Para complicar las cosas, quienes consumen múltiples sustancias pueden también tener un mayor riesgo de sobredosis y muchas sustancias mezcladas con fentanilo no responden a la naloxona, el antídoto para las sobredosis de opioides.
Los autores también hallaron que las muertes por sobredosis de fentanilo y estimulantes afectan desproporcionadamente a las minorías.
Por ejemplo, en 2021 la presencia de estimulantes en muertes por sobredosis de fentanilo en el occidente de EE. UU. fue de 73% entre las mujeres afroamericanas de 65 a 74 años y de 69% entre los hombres afroamericanos de 55 a 65 años. La proporción en la población general de EE. UU. fue de 49%.
También hay patrones geográficos en el uso de fentanilo y estimulantes. En el noreste del país el fentanilo tiende a ser combinado con cocaína, mientras en las regiones meridional y occidental parece estar más asociado con metanfetaminas.
Friedman dijo que él y sus colegas sospechan que ello refleja la creciente disponibilidad de metanfetamina de bajo costo y alta pureza en todo Estados Unidos "y el hecho de que la región noreste tiene un patrón arraigado de uso ilícito de cocaína que hasta ahora ha resistido la completa irrupción de la metanfetamina que se ve en el resto del país".
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