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Las autoridades policiales de Wisconsin, Estados Unidos , lograron la captura de un farmacéutico que dañó, a propósito, 500 dosis de la vacuna contra elcoronavirus COVID-19 fabricadas por el laboratorio Moderna .
Según los informes de Policía, el hoy detenido retiró de los congeladores el antídoto y rompió así la cadena de frío. De esta manera, la vacuna perdió sus propiedades curativas y quedó inservible.
Sin conocer la situación, funcionarios del hospital en el que ocurrieron los hechos alcanzaron a suministrar 57 dosis a ciudadanos.
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Un medio de comunicación estadounidense publicó que, durante las audiencias, el capturado aseguró haber retirado “accidentalmente” las dosis de los congeladores. Pero, horas después, admitió que sacó “intencionalmente” el medicamento durante dos noches consecutivas, el 24 y 25 de diciembre.
Según Jeff Bahr, presidente de Aurora Health Care Medical Group, no existe evidencia que compruebe que el detenido haya manipulado de alguna otra manera los vitales medicamentos.
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Además, Bahr puntualizó que el hospital se comunicó con el laboratorio Moderna para asegurarse de que las vacunas estropeadas que alcanzaron a ser suministradas no dañarían la salud de las personas. El presidente de Aurora afirmó que las dosis “se volvieron menos efectivas o ineficaces”.
El detenido deberá enfrentar a la justicia por poner en peligro la seguridad de un medicamento y daños a la propiedad. Estos son delitos graves en Estados Unidos.
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