Philip Walker, de 37 años, fue hallado en su vivienda de Inglaterra, ahorcado en medio de accesorios eróticos.
Su madre lo encontró y alertó de inmediato a las autoridades, quienes emprendieron la investigación. En su cuarto estaba la famosa saga de libros y películas de ‘50 Sombras de Grey’. También encontraron un juego de mesa, escritos y dibujos pornográficos de la misma temática.
El servicio de ambulancia de Yorkshire llegó a la escena para levantar el cuerpo y con él los juguetes sexuales que usó para ahorcarse, sin calcular que le causarían la muerte.
Sin embargo, miembros de su familia y de la Policía continuaron registrando la habitación, donde descubrieron una caja con más material de la saga.
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Sus familiares informaron que nunca conocieron su obsesión por la historia de E. L. James.
Incluso dijeron que el hombre nunca habló sobre sus intereses sexuales y que el hecho de que eso lo condujera a la muerte fue la mayor sorpresa.
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Las autoridades revelaron los resultados de la investigación en la que concluyeron que sufrió de asfixia autoerótica, por lo tanto, su muerte fue un trágico accidente y no un suicidio, como se pensó inicialmente.