La Policía de Hong Kong detuvo a cuatro personas por el asesinato de la popular modelo Abby Choi tras hallar partes de su cadáver descuartizado en una vivienda de alquiler, en las afueras de la ciudad.
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Las fuerzas de seguridad capturaron este sábado a Alex Kwong, exmarido de la víctima, mientras se encontraba en un muelle de una de las islas periféricas de Hong Kong.
El detenido ya estaba en busca y captura por su implicación en una estafa con oro valorada en unos cinco millones de dólares de Hong Kong (636.000 dólares estadounidenses).
También fueron arrestados los padres y el hermano de Kwong, a los que la Policía sigue interrogando mientras buscan el resto del cuerpo de la modelo Abby Choi, de 28 años y dada por desaparecida el pasado miércoles.
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Dos días después de la desaparición, las autoridades encontraron las piernas de la mujer en un frigorífico de una vivienda recientemente alquilada por su exsuegro, al que la investigación apunta como cerebro del complot para asesinarla a causa de una disputa sobre una propiedad valorada en millones de dólares, según la prensa local.
La Policía, que envió a decenas de agentes e incluso un equipo de submarinismo para buscar la cabeza, las manos y otras partes del cuerpo de la modelo Abby Choi, se incautó en la vivienda de una cortadora de carne, una sierra eléctrica y algunas prendas supuestamente relacionadas con el caso.
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Choi, que contaba con casi 100.000 seguidores en Instagram, se había dado a conocer internacionalmente como modelo, llegando a participar en el desfile de alta costura primavera-verano 2023 de Elie Saab en París y a aparecer en la portada digital de la lujosa revista 'L'Officiel Monaco'.
Las autoridades indicaron que los dos hijos de la modelo Abby Choi y su exmarido quedarán bajo custodia de la madre de la joven.
Exfutbolista confesó que asesinó a un mafioso
En otro crimen espantoso, un exfutbolista confesó el asesinato de un mafioso en Suiza
. Según él, sucedió tras problemas de narcotráfico y ciertas deudas, un fenómeno que tristemente en ocasiones ha manchado el entorno del mundo del fútbol.
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En 2018, el deportista dijo que había cometido el crimen para salvar su vida de las represalias que la organización podía tomar en su contra. En medio de su delación, afirmó que atacó a golpes a la víctima hasta la muerte.
Trató de enterrar el cadáver, pero finalmente lo metió en un saco de dormir y lo subió a un bote inflable. Cuando se encontraba en el centro del Lago Ginebra se deshizo del cuerpo, y aunque cinco años después aún no lo han encontrado, el caso sigue abierto.
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Irá a juicio en mayo de este año.